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ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Batalla del Trebia...

Batalla del Trebia

Artículo principal: Batalla del Trebia

Antes de que la noticia de la derrota del Ticino llegara a Roma, el Senado ordenó al cónsul Tiberio Sempronio Longo traer sus tropas de Sicilia, para reunirse con Escipión y enfrentarse a Aníbal.[73]

Aunque no constituía más que una victoria menor, el resultado del encuentro junto al Ticino incitó a los galos[36] y a los ligures a unirse a los cartagineses,[74] lo que aumentó el tamaño del ejército púnico a 40.000 hombres, de los cuales 14.000 eran galos.[33] Publio Cornelio Escipión, gravemente herido y ante la deserción de algunos de los galos alistados junto a los romanos, se retiró a las tierras altas junto al río Trebia[25] para establecer un nuevo campamento, y salvaguardar de este modo su ejército.[75] Allí esperó la llegada del ejército consular de Tiberio Sempronio Longo, que había partido de Sicilia para reforzar a su colega.

Aníbal, gracias a sus hábiles maniobras, estaba en posición de contrarrestar a Sempronio, pues controlaba la carretera que iba de Placentia a Ariminum, que el cónsul debía seguir si quería unirse a Escipión. Aprovechando la situación, Aníbal tomó por traición Clastidium, actual Casteggio, en Lombardía —donde halló grandes cantidades de suministros para sus hombres. No obstante, este éxito no fue completo, pues, aprovechando la distracción del cartaginés, Sempronio avanzó y logró unirse a Escipión, acampado junto al río Trebia, cerca de Placentia.[76] Apenas llegó Sempronio a la zona, su caballería tuvo una refriega favorable con los forrajeadores púnicos que le hizo ganar confianza.

El día del solsticio de invierno del 218 a. C., tras acosar su campamento con su caballería númida, Aníbal logró que sus enemigos presentasen batalla. El día antes había emboscado a su hermano Magón con efectivos de infantería y caballería en una zona arbustiva cercana a la escena de la batalla. La Batalla del Trebia.[33] tuvo su inicio cuando el ejército romano cruzó el río y chocó contra los efectivos cartagineses. La caballería púnica junto a los elefantes y los hostigadores baleares, se concentró en el acoso de las alas romanas, poniendo en fuga a la caballería enemiga. Fuertemente presionados en las alas, se vieron atacados además por la espalda por los efectivos de Magón que estaban emboscados. Rodeados por todas partes, el centro de la infantería romana consiguió abrirse paso a su frente a través de los galos e hispanos que integraban el centro de la línea cartaginesa. De este modo logró escapar una parte de los efectivos romanos.[28][77] De nuevo Aníbal había logrado una importante victoria, esta vez tras enfrentarse a dos ejércitos romanos mandados por los dos cónsules.