Diagnóstico
La osteoporosis se diagnostica mediante una prueba denominada densitometría ósea, que mide la cantidad de masa ósea del esqueleto.
Su medición se realiza habitualmente a nivel del esqueleto central (columna vertebral y/o cuello del fémur) mediante equipos de radiología concretos (densitometría radiológica dual- DXA). En el caso de que no pueda medirse el esqueleto central debido a la existencia de artrosis avanzada, fracturas o prótesis que invalidarían el resultado, la densitometría puede realizarse en dichos casos en el antebrazo, o en el talón con otros equipos (DXA de medida periférica o ultrasonometría cuantitativa).
Para evaluar las posibles causas secundarias de osteoporosis, se realizan pruebas básicas y complementarias; estas últimas, en función de la sospecha clínica:
Pruebas básicas
• Historia clínica.
• Hemograma completo.
• Bioquímica completa, incluyendo niveles séricos de calcio, fósforo, electrolitos, fosfatasa alcalina y creatinina.
• Niveles séricos de hidroxi-vitamina D3 y TSH.
• Electroforesis de proteínas en suero.
Pruebas complementarias
• Niveles séricos de parathormona, fosfatasa alcalina específica del hueso, prolactina e inmunoglobulinas.
• Inmunoelectroforesis.
• Anticuerpos de enfermedad celíaca.
• Marcadores bioquímicos de remodelamiento óseo (propéptido C-terminal del protocolágeno tipo I).
• Niveles séricos de T4 libre y cortisol plasmático en ayunas.
• 1,25-dihidroxivitamina D.
• Orina de 24 horas para la determinación de calcio, fosfato y aclaramiento de creatinina.
• Biopsia duodenal (para detectar la presencia de una posible enfermedad celíaca, que suele cursar con anticuerpos negativos en sangre en niños mayores y adultos).
• Factor de crecimiento insulínico tipo 1 (en los casos de anorexia y diabetes).
• Factor de crecimiento fibroblástico 23.
• Biopsias óseas.
La osteoporosis se diagnostica mediante una prueba denominada densitometría ósea, que mide la cantidad de masa ósea del esqueleto.
Su medición se realiza habitualmente a nivel del esqueleto central (columna vertebral y/o cuello del fémur) mediante equipos de radiología concretos (densitometría radiológica dual- DXA). En el caso de que no pueda medirse el esqueleto central debido a la existencia de artrosis avanzada, fracturas o prótesis que invalidarían el resultado, la densitometría puede realizarse en dichos casos en el antebrazo, o en el talón con otros equipos (DXA de medida periférica o ultrasonometría cuantitativa).
Para evaluar las posibles causas secundarias de osteoporosis, se realizan pruebas básicas y complementarias; estas últimas, en función de la sospecha clínica:
Pruebas básicas
• Historia clínica.
• Hemograma completo.
• Bioquímica completa, incluyendo niveles séricos de calcio, fósforo, electrolitos, fosfatasa alcalina y creatinina.
• Niveles séricos de hidroxi-vitamina D3 y TSH.
• Electroforesis de proteínas en suero.
Pruebas complementarias
• Niveles séricos de parathormona, fosfatasa alcalina específica del hueso, prolactina e inmunoglobulinas.
• Inmunoelectroforesis.
• Anticuerpos de enfermedad celíaca.
• Marcadores bioquímicos de remodelamiento óseo (propéptido C-terminal del protocolágeno tipo I).
• Niveles séricos de T4 libre y cortisol plasmático en ayunas.
• 1,25-dihidroxivitamina D.
• Orina de 24 horas para la determinación de calcio, fosfato y aclaramiento de creatinina.
• Biopsia duodenal (para detectar la presencia de una posible enfermedad celíaca, que suele cursar con anticuerpos negativos en sangre en niños mayores y adultos).
• Factor de crecimiento insulínico tipo 1 (en los casos de anorexia y diabetes).
• Factor de crecimiento fibroblástico 23.
• Biopsias óseas.