DCA
El DCA es la consecuencia de una lesión, normalmente súbita, en el cerebro que produce un menoscabo en la salud y en la calidad de vida de las personas. Concretamente, la principal causa del DCA es, en hasta un 78% de las ocasiones, un accidente cerebrovascular –o ictus–, mientras que los traumatismos craneoencefálicos, los tumores cerebrales, las anoxias y otras lesiones de origen infeccioso son responsables de un 22% de los casos.
Más concretamente, de los 104.701 nuevos casos de DCA que se producen cada año, 99.284 son causados por accidentes cerebrovasculares, 4.937 por traumatismos craneoencefálicos y 481 por anoxias. Además, el 65,03% de las personas con DCA son mayores de 65 años, dato que se relaciona con la elevada incidencia de ictus en este colectivo conformado en su mayoría por mujeres –52%–. Sin embargo, únicamente un 42% del total de personas con DCA que solicitan la valoración de su dependencia son mujeres.
Como indica FEDACE, “este dato sugiere una especial vulnerabilidad de las mujeres con daño cerebral, que solicitan en menor medida que los varones el reconocimiento administrativo de la discapacidad. Una situación que los investigadores relacionan con factores de edad y culturales. En el último caso, refiriéndose a la tradicional relegación de la mujer de los espacios públicos, que puede influir en la menor solicitud por su parte, o de su entorno familiar, de este certificado”.
El DCA es la consecuencia de una lesión, normalmente súbita, en el cerebro que produce un menoscabo en la salud y en la calidad de vida de las personas. Concretamente, la principal causa del DCA es, en hasta un 78% de las ocasiones, un accidente cerebrovascular –o ictus–, mientras que los traumatismos craneoencefálicos, los tumores cerebrales, las anoxias y otras lesiones de origen infeccioso son responsables de un 22% de los casos.
Más concretamente, de los 104.701 nuevos casos de DCA que se producen cada año, 99.284 son causados por accidentes cerebrovasculares, 4.937 por traumatismos craneoencefálicos y 481 por anoxias. Además, el 65,03% de las personas con DCA son mayores de 65 años, dato que se relaciona con la elevada incidencia de ictus en este colectivo conformado en su mayoría por mujeres –52%–. Sin embargo, únicamente un 42% del total de personas con DCA que solicitan la valoración de su dependencia son mujeres.
Como indica FEDACE, “este dato sugiere una especial vulnerabilidad de las mujeres con daño cerebral, que solicitan en menor medida que los varones el reconocimiento administrativo de la discapacidad. Una situación que los investigadores relacionan con factores de edad y culturales. En el último caso, refiriéndose a la tradicional relegación de la mujer de los espacios públicos, que puede influir en la menor solicitud por su parte, o de su entorno familiar, de este certificado”.