Obviamente todos ustedes se preguntarán qué pasó. Si hasta 1531 sólo había un millón de bautizados, según los datos proporcionados por el Obispo de esas tierras, cómo entre 1531 y 1537 se multiplicó tan impresionantemente el número de conversos, según Motolinía. Y precisamente por eso es que los invité a hacer memoria de esta historia de la evangelización de la América Latina.