En la Biblia encontramos: « ¿No saben ustedes que su cuerpo es templo del Espíritu
Santo que Dios les ha dado, y que el Espíritu Santo vive en ustedes? Ustedes no son sus propios dueños, porque Dios los ha
comprado. Por eso deben honrar a Dios en el cuerpo». (1 Cor. 6, 19-20)