ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Conclusión...

Conclusión

(1) La división « población » del Departamento de asuntos económico-sociales de las Naciones Unidas publicó, el 26 de octubre de 1998, una actualización de los cálculos y proyecciones en materia demográfica. En el capítulo dedicado al aumento del número de personas ancianas, resulta, entre otras cosas, que los 66 millones de personas de más de ochenta años de edad, presentes hoy en el mundo, están destinados a aumentar a 370 millones en el año 2050, cuando se contarán entre ellos 2,2 millones de centenarios.

(2) Los últimos estudios de las Naciones Unidas están modificando —tendiendo siempre a la baja— las previsiones sobre el aumento de la población en las próximas décadas. El FNUAP (Fondo de Población de las Naciones Unidas), en su informe sobre el estado de la población mundial de 1998, confirma esa parálisis demográfica. Sólo en un número muy reducido de países de África sigue siendo elevada la natalidad. En las otras partes —de Asia hasta América Latina— la tasa de natalidad va moderando el paso cada vez más.

(3) La aplicación de estos principios, la quinta revisión del Plan internacional de acción, así como la revisión de la estrategia adoptada en 1992 por la Asamblea de las Naciones Unidas, constituyen los « Objetivos globales relativos al envejecimiento para el año 2001 ».

(4) Insegnamenti di Giovanni Paolo II VII, 1 (1984), p. 744.

(5) Insegnamenti, V, 3 (1982), p. 125.

(6) Juan Pablo II, Discurso a la Iglesia italiana reunida en Palermo con motivo del tercer Encuentro eclesial, L'Osservatore Romano, 24 de noviembre de 1995, p. 5.

(7) Insegnamenti V, 3 (1982), p. 130.

(8) Insegnamenti III, 2 (1980), p. 539.

(9) Cf. Juan Pablo II, Homilía durante la Vigilia de Pentecostés, L'Osservatore Romano, 27-28 de mayo, 1996, p. 7.

(10) Constitución pastoral Gaudium et spes, 1.

(11) Insegnamenti III, 2 (1980), p. 538.

(12) Carta encíclica Evangelium vitae, 65.

(13) Carta apostólica Tertio millennio adveniente, 49.