ZAMORA
El Viernes Santo, Zamora protagoniza la procesión más larga, en la que están presentes cofradías centenarias como las de Santa Vera Cruz o la de Nuestra Madre de las Angustias. Durante siete horas, los penitentes conducen al Jesús Nazareno camino del calvario en medio de escenas de impresionante devoción.
Y es que la Semana Santa de esta ciudad castellana, declarada de Interés Turístico Internacional, tiene en su programa momentos y detalles muy especiales es el caso de el barandales, un personaje que desde principios del siglo XVII encabeza las procesiones de gran parte de las cofradías zamoranas, o de las sopas de ajo de la madrugada del Viernes Santo, o el ‘Dos y pingada’ del Domingo de Resurrección.
El Viernes Santo, Zamora protagoniza la procesión más larga, en la que están presentes cofradías centenarias como las de Santa Vera Cruz o la de Nuestra Madre de las Angustias. Durante siete horas, los penitentes conducen al Jesús Nazareno camino del calvario en medio de escenas de impresionante devoción.
Y es que la Semana Santa de esta ciudad castellana, declarada de Interés Turístico Internacional, tiene en su programa momentos y detalles muy especiales es el caso de el barandales, un personaje que desde principios del siglo XVII encabeza las procesiones de gran parte de las cofradías zamoranas, o de las sopas de ajo de la madrugada del Viernes Santo, o el ‘Dos y pingada’ del Domingo de Resurrección.