ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Vigilia Pascual...

Vigilia Pascual

La celebración litúrgica de la Pascua del Señor se encuentra en los orígenes mismos del culto cristiano. Desde la generación apostólica, los cristianos conmemoraron semanalmente la Resurrección de Cristo, por medio de la asamblea eucarística dominical.

Además, ya en el siglo II, la Iglesia celebra una fiesta específica como memoria actual de la Pascua de Cristo, aunque las distintas tradiciones subrayen uno u otro contenido pascual: Pascua-Pasión (se celebraba el 14 de Nisán, según el calendario lunar judío, y acentuaba el hecho histórico de la Cruz) y Pascua-Glorificación, que, privilegiando la resurrección del Señor, se celebraba el domingo posterior al 14 de Nisán, día de la Resurrección de Cristo. Esta última práctica se impuso en la Iglesia desde comienzos del siglo III. La Noche Santa (San Agustín la llama la “madre de todas las vigilias”) culmina el Santo Triduo e inicia el tiempo pascual, celebrando la Gloria de la Resurrección del Señor. De aquí que su contenido teológico encierre el misterio de Cristo Salvador y del cristiano salvado. Ello explica que, desde los primeros siglos, se celebrase el bautismo de los catecúmenos en la Vigilia Pascual. Como ya indica San Agustín en sus Sermones (220-221), toda la celebración de esta Vigilia Sagrada debe hacerse en la noche, de tal modo que o bien comience después de iniciada la noche, o acabe antes del alba del domingo. La Vigilia Pascual se convierte en el punto central donde confluyen las celebraciones anuales de los misterios de la vida de Cristo.

Este artículo fue publicado por nuestros aliados y amigos: Primero Cristianos