DÍA SÉPTIMO
Comenzar con la oración preparatoria para todos los días.
ORACIÓN
¡Oh Dios misericordioso y clemente! cuyo espíritu de bondad manifestáis a los mortales cuanto más pecadores se os manifiestan. Sois, pues, pastor de las ovejas descarriadas que con vuestra infinita bondad y misericordia las dirigís al redil de la bienaventuranza.
Os pido, mi buen Jesús, infiltréis en mi ese espíritu divino para que yo me arrepienta de todos los pecados cometidos durante mi vida; sea yo tan feliz mereciendo la gracia que prodigasteis a Santa Teresa de Jesús, haciéndola esposa vuestra y que merezca los dones que recibió de vuestra querida Madre para alabaros, bendeciros y gozaros en la gloria por siempre jamás. Amén.
Terminar con tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias a la Santísima Trinidad y hacer la petición que se desea obtener por medio de esta novena.
Comenzar con la oración preparatoria para todos los días.
ORACIÓN
¡Oh Dios misericordioso y clemente! cuyo espíritu de bondad manifestáis a los mortales cuanto más pecadores se os manifiestan. Sois, pues, pastor de las ovejas descarriadas que con vuestra infinita bondad y misericordia las dirigís al redil de la bienaventuranza.
Os pido, mi buen Jesús, infiltréis en mi ese espíritu divino para que yo me arrepienta de todos los pecados cometidos durante mi vida; sea yo tan feliz mereciendo la gracia que prodigasteis a Santa Teresa de Jesús, haciéndola esposa vuestra y que merezca los dones que recibió de vuestra querida Madre para alabaros, bendeciros y gozaros en la gloria por siempre jamás. Amén.
Terminar con tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias a la Santísima Trinidad y hacer la petición que se desea obtener por medio de esta novena.