Lateralidad izquierda, derecha y cruzada
El punto de vista: ¿Nos perturba un mapa "boca abajo"?.
Hoy por hoy, es realmente muy poco lo que se sabe con certeza, y más si lo comparamos con otros campos de la investigación psicológica. Se sabe por ejemplo que los dos hemisferios del cerebro, réplica uno de otro, están implicados en diferentes tipos de actividad. El hemisferio izquierdo más activo en los diestros, está especializado principalmente en los procesos relativos a la inducción, la deducción y el lenguaje, mientras que el hemisferio derecho, nos proporciona las facultades de la visión y la memoria visual, el sentido espacial, la apreciación de la forma y del color y la creatividad.
Quedan sin embargo muchas áreas inexplicadas. Las relaciones anatómicas específicas entre las funciones intelectuales y los grupos de células del cerebro están todavía por definir. Los procesos de la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo, la conciencia del propio «yo», el «subconsciente», el «superyo», la «mente profunda», el lóbulo frontal y la personalidad, las endorfinas y demás neurotransmisores, el pensamiento y la conclusión... por ejemplo, son tan complejos, que es posible que su funcionamiento involucre a la totalidad del cerebro y no solo a regiones determinadas del mismo.
En la mayoría de los adultos, los centros del habla están situados en el lado izquierdo. No obstante, alrededor de un 15 por ciento de los zurdos y un 2 por ciento de los que usan preferentemente la mano derecha, tienen centros del habla en ambas partes del cerebro. De todos modos, algunos zurdos desarrollan el habla en el hemisferio izquierdo únicamente; menos de la mitad la tienen en la parte derecha. Aun cuando el lado derecho del cerebro controla principalmente el lado izquierdo del cuerpo, y el lado izquierdo del cerebro controla, en gran parte, el lado derecho del cuerpo. El hecho de ser ambidiestro indica que las dos mitades del cerebro no han llegado a estar tan completamente especializadas, como quizás lo están en los individuos homogéneamente diestros (u homogéneamente zurdos). En los niños de corta edad, cada lado del cerebro posee, en potencia, la facultad del habla y del lenguaje. Una lesión en el lado izquierdo en los primeros años de vida, da como resultado el desarrollo de la facultad del lenguaje en el lado derecho del cerebro. El dominio del habla y probablemente también de otras facultades se establece firmemente en uno de los hemisferios hacia los diez años de edad y no puede transmitirse al otro posteriormente.
La diferencia de competencias entre los dos hemisferios cerebrales parece ser exclusiva del ser humano. Se trata simplemente de que las dos mitades del cerebro son complementarias.
En animales
La simetría puede ser radial, bilateral o aparentemente bilateral. En los animales con simetría bilateral, como los insectos o nosotros mismos, las mitades derecha e izquierda del cuerpo son especulares, aunque no totalmente. En la organización interior subyace cierta asimetría, a la cual se debe que tengamos el hígado en el lado derecho y el estómago en el izquierdo.
Dentro del mundo animal, lo más extendido es la predominancia de la lateralidad derecha, tanto anatómica, como psíquica. La mayoría de conchas de especies de caracol, tanto terrestres como marinos arrollan a dextrosum, es decir, arrollan a derechas, lo cual origina que la inmensa mayoría de cangrejos predadores que introducen su pinza en la concha para extraerlos, sean diestros. Muchas poblaciones de primates exhiben también una preferencia por una mano. Es común decir que los osos polares son zurdos.
Esta predominancia lateral se ha especulado a que evolutivamente es muy temprana en las especies, remontándose a los invertebrados que ya presentaban concha, como los moluscos. Al parecer fue debida a la facilidad que tienen las sales de calcio, cargadas eléctricamente, a cristalizar en un determinado contexto que favoreció evolutivamente a los individuos diestros o de simetría de arrollamiento diestra.
En humanos
Los estudios muestran que escribir con la mano izquierda no se corresponde necesariamente con una predominancia izquierda absoluta, usando la pierna derecha para patear, por ejemplo, y lo mismo se mantiene en el caso del ojo. Esta condición es más que nada una Lateralidad Cruzada, ya que la repartición de dominancias es alternada y no unificada como sucede con la Lateralidad Homogénea, y puede deberse a un aprendizaje con el uso continuado de herramientas y ejecución de tareas y actividades con una parte del cuerpo y/o mientras se realizan otras con otras partes del cuerpo, simultánea o casi simultáneamente (coordinada/coordinación de extremidades con órganos e intercomunicación-intercoordin ación)
Influencia en el tráfico
La circulación motorizada por la izquierda, propia de países de tradición británica, se remonta a los coches de caballos. Como la mayoría de los cocheros usaban el látigo con la derecha, se dispuso la circulación por el lado izquierdo de la calzada, para no molestar a los viandantes.
Se dice que la zurdera de Napoleón Bonaparte contribuyó al sentido del tráfico en el lado derecho de la carretera en la Francia posrevolucionaria. También se cuenta que el gran militar cabalgaba con la espada en su mano izquierda, y que organizó a su caballería de la misma manera. Se supone que esto podría permitir a la caballería atacar por la derecha a sus oponentes.
El punto de vista: ¿Nos perturba un mapa "boca abajo"?.
Hoy por hoy, es realmente muy poco lo que se sabe con certeza, y más si lo comparamos con otros campos de la investigación psicológica. Se sabe por ejemplo que los dos hemisferios del cerebro, réplica uno de otro, están implicados en diferentes tipos de actividad. El hemisferio izquierdo más activo en los diestros, está especializado principalmente en los procesos relativos a la inducción, la deducción y el lenguaje, mientras que el hemisferio derecho, nos proporciona las facultades de la visión y la memoria visual, el sentido espacial, la apreciación de la forma y del color y la creatividad.
Quedan sin embargo muchas áreas inexplicadas. Las relaciones anatómicas específicas entre las funciones intelectuales y los grupos de células del cerebro están todavía por definir. Los procesos de la memoria a corto plazo y la memoria a largo plazo, la conciencia del propio «yo», el «subconsciente», el «superyo», la «mente profunda», el lóbulo frontal y la personalidad, las endorfinas y demás neurotransmisores, el pensamiento y la conclusión... por ejemplo, son tan complejos, que es posible que su funcionamiento involucre a la totalidad del cerebro y no solo a regiones determinadas del mismo.
En la mayoría de los adultos, los centros del habla están situados en el lado izquierdo. No obstante, alrededor de un 15 por ciento de los zurdos y un 2 por ciento de los que usan preferentemente la mano derecha, tienen centros del habla en ambas partes del cerebro. De todos modos, algunos zurdos desarrollan el habla en el hemisferio izquierdo únicamente; menos de la mitad la tienen en la parte derecha. Aun cuando el lado derecho del cerebro controla principalmente el lado izquierdo del cuerpo, y el lado izquierdo del cerebro controla, en gran parte, el lado derecho del cuerpo. El hecho de ser ambidiestro indica que las dos mitades del cerebro no han llegado a estar tan completamente especializadas, como quizás lo están en los individuos homogéneamente diestros (u homogéneamente zurdos). En los niños de corta edad, cada lado del cerebro posee, en potencia, la facultad del habla y del lenguaje. Una lesión en el lado izquierdo en los primeros años de vida, da como resultado el desarrollo de la facultad del lenguaje en el lado derecho del cerebro. El dominio del habla y probablemente también de otras facultades se establece firmemente en uno de los hemisferios hacia los diez años de edad y no puede transmitirse al otro posteriormente.
La diferencia de competencias entre los dos hemisferios cerebrales parece ser exclusiva del ser humano. Se trata simplemente de que las dos mitades del cerebro son complementarias.
En animales
La simetría puede ser radial, bilateral o aparentemente bilateral. En los animales con simetría bilateral, como los insectos o nosotros mismos, las mitades derecha e izquierda del cuerpo son especulares, aunque no totalmente. En la organización interior subyace cierta asimetría, a la cual se debe que tengamos el hígado en el lado derecho y el estómago en el izquierdo.
Dentro del mundo animal, lo más extendido es la predominancia de la lateralidad derecha, tanto anatómica, como psíquica. La mayoría de conchas de especies de caracol, tanto terrestres como marinos arrollan a dextrosum, es decir, arrollan a derechas, lo cual origina que la inmensa mayoría de cangrejos predadores que introducen su pinza en la concha para extraerlos, sean diestros. Muchas poblaciones de primates exhiben también una preferencia por una mano. Es común decir que los osos polares son zurdos.
Esta predominancia lateral se ha especulado a que evolutivamente es muy temprana en las especies, remontándose a los invertebrados que ya presentaban concha, como los moluscos. Al parecer fue debida a la facilidad que tienen las sales de calcio, cargadas eléctricamente, a cristalizar en un determinado contexto que favoreció evolutivamente a los individuos diestros o de simetría de arrollamiento diestra.
En humanos
Los estudios muestran que escribir con la mano izquierda no se corresponde necesariamente con una predominancia izquierda absoluta, usando la pierna derecha para patear, por ejemplo, y lo mismo se mantiene en el caso del ojo. Esta condición es más que nada una Lateralidad Cruzada, ya que la repartición de dominancias es alternada y no unificada como sucede con la Lateralidad Homogénea, y puede deberse a un aprendizaje con el uso continuado de herramientas y ejecución de tareas y actividades con una parte del cuerpo y/o mientras se realizan otras con otras partes del cuerpo, simultánea o casi simultáneamente (coordinada/coordinación de extremidades con órganos e intercomunicación-intercoordin ación)
Influencia en el tráfico
La circulación motorizada por la izquierda, propia de países de tradición británica, se remonta a los coches de caballos. Como la mayoría de los cocheros usaban el látigo con la derecha, se dispuso la circulación por el lado izquierdo de la calzada, para no molestar a los viandantes.
Se dice que la zurdera de Napoleón Bonaparte contribuyó al sentido del tráfico en el lado derecho de la carretera en la Francia posrevolucionaria. También se cuenta que el gran militar cabalgaba con la espada en su mano izquierda, y que organizó a su caballería de la misma manera. Se supone que esto podría permitir a la caballería atacar por la derecha a sus oponentes.