El inicio de la Semana Santa
Como ya se ha referido y es popular, la celebración de la Semana Santa se lleva a cabo cuando manda el calendario lunar. Los siete días que la preceden se conocen como Semana de Pasión. Por este motivo, el Viernes de Dolores también es conocido como Viernes de Pasión.
Los católicos expresan su fervor religioso en esta celebración por los 'Dolores de la Virgen María' en la semana que precede a la conmemoración de la muerte y resurrección de Cristo.
En algunas regiones, como en Andalucía, suele ser el pistoletazo de salida para las procesiones. No siempre es así, ya que por ejemplo en Jerez de la Frontera (Andalucía) se pueden ver procesionar misterios incluso el jueves de esa quinta semana de cuaresma.
Pero no sólo en el sur de España ocurre esto. Por ejemplo, en Cartagena cada Viernes de Dolores se celebra el día gran de su patrona, la Virgen de la Caridad.
Igualmente, hay otras regiones que estiman el Viernes de Dolores como Viernes de Concilio. El ayuno y la abstinencia toman la batuta de los hogares más critianos, quedando prohibido el consumo de carnes.
Como ya se ha referido y es popular, la celebración de la Semana Santa se lleva a cabo cuando manda el calendario lunar. Los siete días que la preceden se conocen como Semana de Pasión. Por este motivo, el Viernes de Dolores también es conocido como Viernes de Pasión.
Los católicos expresan su fervor religioso en esta celebración por los 'Dolores de la Virgen María' en la semana que precede a la conmemoración de la muerte y resurrección de Cristo.
En algunas regiones, como en Andalucía, suele ser el pistoletazo de salida para las procesiones. No siempre es así, ya que por ejemplo en Jerez de la Frontera (Andalucía) se pueden ver procesionar misterios incluso el jueves de esa quinta semana de cuaresma.
Pero no sólo en el sur de España ocurre esto. Por ejemplo, en Cartagena cada Viernes de Dolores se celebra el día gran de su patrona, la Virgen de la Caridad.
Igualmente, hay otras regiones que estiman el Viernes de Dolores como Viernes de Concilio. El ayuno y la abstinencia toman la batuta de los hogares más critianos, quedando prohibido el consumo de carnes.