Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz, 6 de abril
El 23 de agosto de 2013 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 67/296 "decide proclamar el 6 de abril Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz. Invita a los Estados, el sistema de las Naciones Unidas y, en particular, la Oficina de las Naciones Unidas sobre el Deporte para el Desarrollo y la Paz, las organizaciones internacionales competentes, las organizaciones deportivas internacionales, regionales y nacionales, la sociedad civil, incluidas las organizaciones no gubernamentales y el sector privado, y todos los demás interesados pertinentes a que cooperen, observen el Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz y creen conciencia al respecto".
El deporte y la ONU
El deporte ha desempeñado históricamente un papel importante en todas las sociedades, ya sea en forma de competiciones deportivas, de actividades físicas o de juegos. Pero uno puede preguntarse: ¿qué tiene que ver el deporte con las Naciones Unidas? De hecho, el deporte es un socio natural para el sistema de la ONU.
El deporte como derecho fundamental
El deporte y el juego son derechos humanos que deben ser respetados y aplicados en todo el mundo; el derecho al acceso y a la participación en los deportes se ha reconocido en numerosas convenciones internacionales. La UNESCO en 1978 reconoció el deporte y la educación física como un "derecho fundamental para todo el mundo". A pesar de todo, a día de hoy este derecho es todavía ignorado o no se respeta.
El deporte como arma poderosa
El deporte sirve para estrechar lazos sociales y para promover valores como la paz, la fraternidad, solidaridad, no violencia, tolerancia y justicia.
El deporte y la paz
El deporte como lenguaje universal puede servir para promover la paz, la tolerancia y la comprensión más allá de fronteras, culturas y religiones. Todo el mundo entiende los valores intrínsecos del deporte, como el trabajo en equipo, la equidad, la disciplina, el respeto por el oponente y las reglas del juego; valores que pueden llevar a la consecución de la solidaridad, la cohesión social y la coexistencia pacífica.
Los programas deportivos permiten el encuentro en territorios neutrales y en un ambiente donde la agresión puede controlarse y transformarse, con lo que se facilita el acercamiento y la reconciliación entre las partes contrarias.
A pesar de que el deporte no puede por sí mismo resolver conflictos, puede, sin embargo, ser un medio efectivo y rentable para aliviar o facilitar la vuelta a la normalidad tras los conflictos y en las fases de construcción de la paz, así como para la prevención de conflictos.
El deporte y el desarrollo sostenible
En la Declaración de la Agenda 2030 para un Desarrollo Sostenible se reconoce aún más el papel del deporte en el progreso social:
Organización de las Naciones Unidas
El 23 de agosto de 2013 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 67/296 "decide proclamar el 6 de abril Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz. Invita a los Estados, el sistema de las Naciones Unidas y, en particular, la Oficina de las Naciones Unidas sobre el Deporte para el Desarrollo y la Paz, las organizaciones internacionales competentes, las organizaciones deportivas internacionales, regionales y nacionales, la sociedad civil, incluidas las organizaciones no gubernamentales y el sector privado, y todos los demás interesados pertinentes a que cooperen, observen el Día Internacional del Deporte para el Desarrollo y la Paz y creen conciencia al respecto".
El deporte y la ONU
El deporte ha desempeñado históricamente un papel importante en todas las sociedades, ya sea en forma de competiciones deportivas, de actividades físicas o de juegos. Pero uno puede preguntarse: ¿qué tiene que ver el deporte con las Naciones Unidas? De hecho, el deporte es un socio natural para el sistema de la ONU.
El deporte como derecho fundamental
El deporte y el juego son derechos humanos que deben ser respetados y aplicados en todo el mundo; el derecho al acceso y a la participación en los deportes se ha reconocido en numerosas convenciones internacionales. La UNESCO en 1978 reconoció el deporte y la educación física como un "derecho fundamental para todo el mundo". A pesar de todo, a día de hoy este derecho es todavía ignorado o no se respeta.
El deporte como arma poderosa
El deporte sirve para estrechar lazos sociales y para promover valores como la paz, la fraternidad, solidaridad, no violencia, tolerancia y justicia.
El deporte y la paz
El deporte como lenguaje universal puede servir para promover la paz, la tolerancia y la comprensión más allá de fronteras, culturas y religiones. Todo el mundo entiende los valores intrínsecos del deporte, como el trabajo en equipo, la equidad, la disciplina, el respeto por el oponente y las reglas del juego; valores que pueden llevar a la consecución de la solidaridad, la cohesión social y la coexistencia pacífica.
Los programas deportivos permiten el encuentro en territorios neutrales y en un ambiente donde la agresión puede controlarse y transformarse, con lo que se facilita el acercamiento y la reconciliación entre las partes contrarias.
A pesar de que el deporte no puede por sí mismo resolver conflictos, puede, sin embargo, ser un medio efectivo y rentable para aliviar o facilitar la vuelta a la normalidad tras los conflictos y en las fases de construcción de la paz, así como para la prevención de conflictos.
El deporte y el desarrollo sostenible
En la Declaración de la Agenda 2030 para un Desarrollo Sostenible se reconoce aún más el papel del deporte en el progreso social:
Organización de las Naciones Unidas