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HISTORIA
La extracción de esmeraldas se remonta a más de 3.000 años atrás, en la época del Imperio del Antiguo Egipto. Las primeras minas de esmeraldas mencionadas en la historia, fueron las famosas minas de Cleopatra, redescubiertas en el Norte de Egipto en 1818. Estos antiguos yacimientos estaban ya agotados desde hacía mucho tiempo.
El "fuego verde" resultaba tan fascinante que los conquistadores españoles llevaron a cabo una campaña sangrienta con el fin de descubrir la localización de las minas de esmeraldas en América del Sur. En 1557, la campaña finalmente concluyó con el descubrimiento de las espectaculares minas de Muzo y Chivor en la actual Colombia.
A los mongoles de la India les gustaban tanto las esmeraldas que grababan en ellas sus textos sagrados y las portaban como talismán.
En las viejas culturas de Europa e India, la esmeralda se relacionaba con Mercurio, el mensajero de los dioses y el dios de los caminos y de los sueños, y por lo tanto era considerada la piedra de la inspiración divina.
La extracción de esmeraldas se remonta a más de 3.000 años atrás, en la época del Imperio del Antiguo Egipto. Las primeras minas de esmeraldas mencionadas en la historia, fueron las famosas minas de Cleopatra, redescubiertas en el Norte de Egipto en 1818. Estos antiguos yacimientos estaban ya agotados desde hacía mucho tiempo.
El "fuego verde" resultaba tan fascinante que los conquistadores españoles llevaron a cabo una campaña sangrienta con el fin de descubrir la localización de las minas de esmeraldas en América del Sur. En 1557, la campaña finalmente concluyó con el descubrimiento de las espectaculares minas de Muzo y Chivor en la actual Colombia.
A los mongoles de la India les gustaban tanto las esmeraldas que grababan en ellas sus textos sagrados y las portaban como talismán.
En las viejas culturas de Europa e India, la esmeralda se relacionaba con Mercurio, el mensajero de los dioses y el dios de los caminos y de los sueños, y por lo tanto era considerada la piedra de la inspiración divina.