Promover un nuevo contrato social
Una recuperación mundial de la COVID-19 que tenga en cuenta las cuestiones de género no debería aspirar solo a una vuelta al statu quo previo a la pandemia. Tiene que promover un nuevo contrato social en el que nadie en el poder esté por encima de la ley, y ningún indefenso esté desprotegido ante la ley, con el objetivo final de lograr la verdadera igualdad y justicia. Esto conlleva una acción decisiva para mitigar los riesgos y prevenir la violencia sexual, y para asegurar que nadie se quede atrás.
Las respuestas deben ser amplias, multisectoriales, adaptadas a la edad y centradas en los supervivientes, incluido el suministro de atención médica, los servicios de salud sexual y reproductiva, el apoyo psicosocial, la asistencia para la subsistencia, el apoyo a la reintegración socioeconómica y el acceso a la justicia. La cobertura de los servicios debe llegar a los supervivientes de zonas rurales, remotas y fronterizas, así como a los refugiados y desplazados (S/2021/312).
Una recuperación mundial de la COVID-19 que tenga en cuenta las cuestiones de género no debería aspirar solo a una vuelta al statu quo previo a la pandemia. Tiene que promover un nuevo contrato social en el que nadie en el poder esté por encima de la ley, y ningún indefenso esté desprotegido ante la ley, con el objetivo final de lograr la verdadera igualdad y justicia. Esto conlleva una acción decisiva para mitigar los riesgos y prevenir la violencia sexual, y para asegurar que nadie se quede atrás.
Las respuestas deben ser amplias, multisectoriales, adaptadas a la edad y centradas en los supervivientes, incluido el suministro de atención médica, los servicios de salud sexual y reproductiva, el apoyo psicosocial, la asistencia para la subsistencia, el apoyo a la reintegración socioeconómica y el acceso a la justicia. La cobertura de los servicios debe llegar a los supervivientes de zonas rurales, remotas y fronterizas, así como a los refugiados y desplazados (S/2021/312).