1 de enero
El 1 de enero es el primer día del año en el calendario gregoriano. Quedan 364 días para finalizar el año y 365 en los años bisiestos. En el calendario juliano empezó a ser el primer día del año en el 153 a. C. 1
Durante la Edad Media, bajo la influencia de la Iglesia Católica, muchos países de Europa occidental decidieron trasladar el comienzo del año a una de las varias fiestas cristianas importantes: el 25 de diciembre (la Natividad de Jesús), el 1 de marzo, el 25 de marzo (la Anunciación), o incluso la Pascua. El Imperio Bizantino comenzaba el año el 1 de septiembre.
En Inglaterra, el 1 de enero se celebraba como el festival de Año Nuevo, pero desde el siglo XII hasta 1752 el año en Inglaterra comenzaba el 25 de marzo (Día de la Dama). Así, por ejemplo, el registro parlamentario señala que la ejecución de Carlos I ocurrió el 30 de enero de 1648 (ya que el año no terminó hasta el 24 de marzo), aunque las historias modernas ajustan el comienzo del año al 1 de enero y registran la ejecución como si ocurriera en 1649.
La mayoría de los países de Europa occidental cambiaron el comienzo del año al 1 de enero antes de adoptar el calendario gregoriano. Por ejemplo, Escocia cambió el comienzo del Año Nuevo escocés al 1 de enero en 1600. Inglaterra, Irlanda y las colonias británicas cambiaron el comienzo del año al 1 de enero en 1752. Más tarde ese año en septiembre, el calendario gregoriano se introdujo en toda Gran Bretaña y las colonias británicas. Estas dos reformas fueron implementadas por el Calendario (Nuevo Estilo) Ley de 1750.
El 1 de enero es el primer día del año en el calendario gregoriano. Quedan 364 días para finalizar el año y 365 en los años bisiestos. En el calendario juliano empezó a ser el primer día del año en el 153 a. C. 1
Durante la Edad Media, bajo la influencia de la Iglesia Católica, muchos países de Europa occidental decidieron trasladar el comienzo del año a una de las varias fiestas cristianas importantes: el 25 de diciembre (la Natividad de Jesús), el 1 de marzo, el 25 de marzo (la Anunciación), o incluso la Pascua. El Imperio Bizantino comenzaba el año el 1 de septiembre.
En Inglaterra, el 1 de enero se celebraba como el festival de Año Nuevo, pero desde el siglo XII hasta 1752 el año en Inglaterra comenzaba el 25 de marzo (Día de la Dama). Así, por ejemplo, el registro parlamentario señala que la ejecución de Carlos I ocurrió el 30 de enero de 1648 (ya que el año no terminó hasta el 24 de marzo), aunque las historias modernas ajustan el comienzo del año al 1 de enero y registran la ejecución como si ocurriera en 1649.
La mayoría de los países de Europa occidental cambiaron el comienzo del año al 1 de enero antes de adoptar el calendario gregoriano. Por ejemplo, Escocia cambió el comienzo del Año Nuevo escocés al 1 de enero en 1600. Inglaterra, Irlanda y las colonias británicas cambiaron el comienzo del año al 1 de enero en 1752. Más tarde ese año en septiembre, el calendario gregoriano se introdujo en toda Gran Bretaña y las colonias británicas. Estas dos reformas fueron implementadas por el Calendario (Nuevo Estilo) Ley de 1750.