Ssmaym/Awussu
Como el frío intenso del invierno, también la canícula dura 40 días, des 12 yulyuz (= 25 de julio al 20 ghusht (= 2 de septiembre). El momento central del período es el 1 de ghusht (agosto) (también el nombre de awussu, difuso en Túnez y Libia, parece remontarse al latín augustus). En esta fecha se realizan ritos particulares, de evidente tradición preislámica pero también precristiana. Se trata en particular de fogatas estivales (que en otras localidades se realizan durante el solsticio de verano: una tradición ya condenada como pagana por san Agustín) o bien de ritos de agua, como los difundidos en localidades costeras de Túnez y de Tripolitania que prevén, durante tres noches, que haya que arrojarse al mar con el fin de preservar la salud. En estas ceremonias familias enteras se arrojan al mar, llevando incluso sus animales domésticos. Aun cuando el rito ha sido asumido por la cultura islámica (esas noches las aguas del pozo de Zemzem, en La Meca se vierten en el mar con el fin de que al contacto con este se produzcan "olas benéficas" de agua dulce), muchos llaman a esta fiesta las noches del error. De hecho se acostumbraba, con el fin de procurar la fertilidad y abundancia, que las parejas tuvieran relaciones sexuales en el mar.
Como el frío intenso del invierno, también la canícula dura 40 días, des 12 yulyuz (= 25 de julio al 20 ghusht (= 2 de septiembre). El momento central del período es el 1 de ghusht (agosto) (también el nombre de awussu, difuso en Túnez y Libia, parece remontarse al latín augustus). En esta fecha se realizan ritos particulares, de evidente tradición preislámica pero también precristiana. Se trata en particular de fogatas estivales (que en otras localidades se realizan durante el solsticio de verano: una tradición ya condenada como pagana por san Agustín) o bien de ritos de agua, como los difundidos en localidades costeras de Túnez y de Tripolitania que prevén, durante tres noches, que haya que arrojarse al mar con el fin de preservar la salud. En estas ceremonias familias enteras se arrojan al mar, llevando incluso sus animales domésticos. Aun cuando el rito ha sido asumido por la cultura islámica (esas noches las aguas del pozo de Zemzem, en La Meca se vierten en el mar con el fin de que al contacto con este se produzcan "olas benéficas" de agua dulce), muchos llaman a esta fiesta las noches del error. De hecho se acostumbraba, con el fin de procurar la fertilidad y abundancia, que las parejas tuvieran relaciones sexuales en el mar.