Flechas y Pelayos en el franquismo
Pelayos fue el nombre que recibió la organización juvenil de los requetés (carlista), cuya sección femenina se conocía como las margaritas. En 1938 (en plena Guerra Civil Española y tras el Decreto de Unificación), se denominó Flechas y Pelayos a la fusión de los boletines o revistas juveniles de estas organizaciones con las similares de Falange Española (cuyos integrantes se denominaban flechas).
La publicación infantil Flechas y Pelayos fue un cómic de la posguerra española.
Las denominaciones fueron heredadas por la OJE, organización totalitaria de encuadramiento juvenil en la España franquista.
El nombre de Pelayos, que aludía al santo niño, era especialmente adecuado como modelo propuesto por esa organización a los jóvenes de la Nueva España o España Imperial de la época del nacionalcatolicismo. Al mismo tiempo coincidía con otro modelo o referencia tópica muy utilizado: el de Don Pelayo, descrito como caudillo providencial que comenzó la Reconquista (comparado al propio Franco).
Pelayos fue el nombre que recibió la organización juvenil de los requetés (carlista), cuya sección femenina se conocía como las margaritas. En 1938 (en plena Guerra Civil Española y tras el Decreto de Unificación), se denominó Flechas y Pelayos a la fusión de los boletines o revistas juveniles de estas organizaciones con las similares de Falange Española (cuyos integrantes se denominaban flechas).
La publicación infantil Flechas y Pelayos fue un cómic de la posguerra española.
Las denominaciones fueron heredadas por la OJE, organización totalitaria de encuadramiento juvenil en la España franquista.
El nombre de Pelayos, que aludía al santo niño, era especialmente adecuado como modelo propuesto por esa organización a los jóvenes de la Nueva España o España Imperial de la época del nacionalcatolicismo. Al mismo tiempo coincidía con otro modelo o referencia tópica muy utilizado: el de Don Pelayo, descrito como caudillo providencial que comenzó la Reconquista (comparado al propio Franco).