Su ministerio temprano
Pablo de Tarso comenzó su ministerio en Damasco y Arabia, nombre con el cual se hacía referencia al reino nabateo. Fue perseguido por el etnarca Aretas IV, hecho que se suele datar de los años 38-39,115 o quizás de antes del año 36.
Pablo huyó a Jerusalén donde, según la Epístola a los gálatas (1, 18-19), visitó y conversó con Pedro y con Santiago. Según los Hechos (9, 26-28), fue Bernabé quien lo llevó ante los apóstoles. Podría interpretarse que fue entonces cuando le transmitieron a Pablo lo que más tarde mencionó en sus cartas haber recibido por tradición sobre Jesús. La estancia en Jerusalén fue breve: se habría visto obligado a huir de Jerusalén para escapar de los judíos de habla griega. Fue conducido a Cesarea Marítima y enviado a refugiarse en Tarso de Cilicia.
Bernabé acudió a Tarso y fue con Pablo a Antioquía, donde surgió por primera vez la denominación de «cristianos» para los discípulos de Jesús. Pablo habría pasado un año evangelizando allí, antes de ser enviado a Jerusalén con ayuda para aquellos que sufrían hambruna. Antioquía se convertiría en el centro de los cristianos convertidos desde el paganismo.
Pablo de Tarso comenzó su ministerio en Damasco y Arabia, nombre con el cual se hacía referencia al reino nabateo. Fue perseguido por el etnarca Aretas IV, hecho que se suele datar de los años 38-39,115 o quizás de antes del año 36.
Pablo huyó a Jerusalén donde, según la Epístola a los gálatas (1, 18-19), visitó y conversó con Pedro y con Santiago. Según los Hechos (9, 26-28), fue Bernabé quien lo llevó ante los apóstoles. Podría interpretarse que fue entonces cuando le transmitieron a Pablo lo que más tarde mencionó en sus cartas haber recibido por tradición sobre Jesús. La estancia en Jerusalén fue breve: se habría visto obligado a huir de Jerusalén para escapar de los judíos de habla griega. Fue conducido a Cesarea Marítima y enviado a refugiarse en Tarso de Cilicia.
Bernabé acudió a Tarso y fue con Pablo a Antioquía, donde surgió por primera vez la denominación de «cristianos» para los discípulos de Jesús. Pablo habría pasado un año evangelizando allí, antes de ser enviado a Jerusalén con ayuda para aquellos que sufrían hambruna. Antioquía se convertiría en el centro de los cristianos convertidos desde el paganismo.