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ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Teología paulina...

Teología paulina

Se denomina teología paulina al estudio razonado, sistemático e integral del pensamiento de Pablo de Tarso, que experimentó desarrollos y retoques en las sucesivas interpretaciones que se hicieron de sus escritos. La presentación sumaria de la teología de san Pablo es muy ardua. La mayor dificultad de cualquier intento de sistematización del pensamiento del Apóstol radica en que Pablo no era un teólogo sistemático, por lo cual cualquier categorización y ordenamiento parece responder más a las preguntas del exégeta que a esquemas paulinos.

Por mucho tiempo el debate estuvo supeditado a una disyuntiva. Según la tesis luterana clásica, el tema fundamental de la teología paulina sería el de la justificación de la fe sin las obras de la Ley. A partir de esa tesis se llegó a considerar que en la doctrina paulina así entendida estaba el núcleo central del anuncio cristiano. En el siglo XX, la postura a favor del principio de la sola fide fue una constante en el trasfondo y en la orientación del pensamiento de Rudolf Karl Bultmann y también se presentó, con una variedad de matices, en seguidores suyos tales como Ernst Käsemann​ o G. Bornkamm.

Desde el punto de vista del catolicismo, si bien la justificación forma parte del mensaje paulino, no constituye su núcleo central único. El argumento tradicional católico sostenía que Dios, más que «declarar justo» al hombre, hace justo al hombre transformándolo.

En los últimos años, diferentes estudiosos protestantes, tales como Krister Stendahl,​ Ed Parish Sanders,​​ y James D. G. Dunn,​ criticaron la postura luterana clásica que oponía una fe cristiana portadora de la gracia y de la libertad contra un presunto judaísmo tradicional afecto al legalismo y exaltación soberbia de la observancia de las prescripciones mosaicas. Después de presentar la dificultad de «escribir una teología de Pablo», James Dunn propuso en su libro a modo de esquema lo siguiente: Dios y la humanidad – la humanidad bajo interdicción – el Evangelio de Jesucristo – el comienzo de la salvación – el proceso de la salvación – la Iglesia – la ética.

Los autores católicos (Lucien Cerfaux,​ Rudolf Schnackenburg,​ y particularmente Joseph A. Fitzmyer) centraron la teología de Pablo en su pensamiento sobre Cristo, particularmente sobre su muerte y su resurrección. J. Fitzmyer señaló la cristología como centro de la teología paulina.​ Para él, la teología paulina sería una teología cristocéntrica, es decir, una teología cuyo eje principal es Cristo muerto y resucitado. Otros autores como Joachim Gnilka y Giuseppe Barbaglio hablan de un teocentrismo paulino, lo que quiere implicar que todo el pensamiento de Pablo arranca de Dios y vuelve a Él.

Por otra parte, una detallada observación de las epístolas paulinas auténticas permite advertir que en el pensamiento del Apóstol se produjo una evolución y que, en consecuencia, no se podría hablar de un único centro de interés en su predicación.​ G. Barbaglio propuso que el Apóstol escribe una «teología en epístola». De allí que el esquema de Barbaglio consistió en presentar la teología de cada carta siguiendo cronológicamente cada una de las siete epístolas auténticamente paulinas, para finalizar con un capítulo titulado: «Coherencia de la teología de Pablo: hermenéutica del Evangelio».​

Según R. Penna, se tiende a aceptar que en el centro del pensamiento de Pablo se encuentra el «evento-Cristo», hecho concluyente en «su teología». La discusión discurre sobre las consecuencias (antropológicas, escatológicas, eclesiológicas) de ese dato. Brown sugirió que todas las propuestas encierran parte de verdad, pero derivan de «juicios analíticos» posteriores a Pablo.