Restricciones
Desde 1997 se evita registrar en el libro la duplicidad de récords conseguidos por una misma persona. Ese mismo año, fue rechazada la candidatura del marine Gregory Koval, que había sido el primer miembro de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos en obtener la máxima condecoración de los boy scouts (la Eagle Scout). Los editores adujeron que cualquier hazaña con carácter de evento único y que no sea probable que se vuelva a repetir, no tiene sentido que sea incluida en el libro.
La expulsión de Norris McWhirter y su función de consultoría en 1995 y la decisión posterior de vender la marca Guinness World Records, han cambiado la orientación del texto, que ha dejado de ser un libro de referencia para convertirse en un simple muestrario de récords. Este cambio significa que la mayoría de los récords del mundo ya no aparecen en el libro (o en el sitio web), y solo pueden optar a aparecer mediante una solicitud escrita a Guinness con la propuesta del récord que se desea romper. Para aquellos que no pueden esperar la respuesta entre cuatro y seis semanas, Guinness admite un proceso de solicitud por una vía rápida mediante el pago de 800$.
Desde 1997 se evita registrar en el libro la duplicidad de récords conseguidos por una misma persona. Ese mismo año, fue rechazada la candidatura del marine Gregory Koval, que había sido el primer miembro de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos en obtener la máxima condecoración de los boy scouts (la Eagle Scout). Los editores adujeron que cualquier hazaña con carácter de evento único y que no sea probable que se vuelva a repetir, no tiene sentido que sea incluida en el libro.
La expulsión de Norris McWhirter y su función de consultoría en 1995 y la decisión posterior de vender la marca Guinness World Records, han cambiado la orientación del texto, que ha dejado de ser un libro de referencia para convertirse en un simple muestrario de récords. Este cambio significa que la mayoría de los récords del mundo ya no aparecen en el libro (o en el sitio web), y solo pueden optar a aparecer mediante una solicitud escrita a Guinness con la propuesta del récord que se desea romper. Para aquellos que no pueden esperar la respuesta entre cuatro y seis semanas, Guinness admite un proceso de solicitud por una vía rápida mediante el pago de 800$.