Reliquias
Las reliquias de San Andrés el Apóstol se encuentran mayormente en sus dos principales santuarios: la Catedral de San Andrés Apóstol en Amalfi (Italia) y en la Catedral de San Andrés Apóstol en la ciudad de Patras en Grecia.
Los restos de San Andrés fueron llevados a Amalfi desde Constantinopla en 1206 durante la Cuarta Cruzada por el Cardenal Pedro de Capua.
El Apóstol fue martirizado en la ciudad de Patras, Acaya. En la catedral de la ciudad se encuentran varias reliquias: el dedo meñique, parte de la parte superior del cráneo del Apóstol, y pequeñas porciones de la cruz en la que fue martirizado, todo guardado en un relicario especial. El sagrado cráneo del Apóstol fue enviado allí desde la Basílica de San Pedro en Roma (se hallaba en el interior del pilar suroeste, mirando al baldaquino), en septiembre de 1964, por orden del Papa Pablo VI. La cruz de San Andrés fue tomada de Grecia durante las cruzadas por el duque de Borgoña. Partes de la cruz se mantuvieron desde la Edad Media en la Abadía de San Víctor de Marsella. Fueron devueltos a Patras en 1980.
Las reliquias de San Andrés el Apóstol se encuentran mayormente en sus dos principales santuarios: la Catedral de San Andrés Apóstol en Amalfi (Italia) y en la Catedral de San Andrés Apóstol en la ciudad de Patras en Grecia.
Los restos de San Andrés fueron llevados a Amalfi desde Constantinopla en 1206 durante la Cuarta Cruzada por el Cardenal Pedro de Capua.
El Apóstol fue martirizado en la ciudad de Patras, Acaya. En la catedral de la ciudad se encuentran varias reliquias: el dedo meñique, parte de la parte superior del cráneo del Apóstol, y pequeñas porciones de la cruz en la que fue martirizado, todo guardado en un relicario especial. El sagrado cráneo del Apóstol fue enviado allí desde la Basílica de San Pedro en Roma (se hallaba en el interior del pilar suroeste, mirando al baldaquino), en septiembre de 1964, por orden del Papa Pablo VI. La cruz de San Andrés fue tomada de Grecia durante las cruzadas por el duque de Borgoña. Partes de la cruz se mantuvieron desde la Edad Media en la Abadía de San Víctor de Marsella. Fueron devueltos a Patras en 1980.