La celebración
La parte central de la fiesta de Los Zaragozas de Sanare, se inicia justamente a primeras horas de la madrugada, cuando las personas que se disfrazan, salen de diversos sitios a iniciar sus correrías por algunas calles, y luego se reúnen en casa de la capitana, el cual es el rango jerárquico de mayor altura en el proceso de la celebración. Se preparan para su inicio que lleva el nombre de rompimiento, lo cual consiste en canto de la salve, tonos y algunas oraciones frente al altar cubierto con una colcha floreada, adornado con flores y plantas, donde ha sido colocado el cuadro de los Santos Inocentes. El altar, al ritmo de música, cantos y oraciones se dirigen todos hacia la capilla de los Zaragozas, donde a las siete u ocho de la mañana aproximadamente se celebra la primera misa en la Iglesia San Isidro.
Terminada la misa, a las nueve o diez de la mañana, la multitud se dirige por la calle central de Sanare hacia la Iglesia Santa Ana en el Barrio Arriba, para cumplir con el acto religioso de ese día. Finalizada la misa de Santa Ana, se pagan unas promesas en el altozano, luego se dirigen al Anfiteatro para el Folklore y la cultura, situado frente al templo parroquial donde tocan, cantan, danzan y bailan, al mismo tiempo pagan promesas de los fieles devotos. Terminada esta parte, piden permiso al Consejo Municipal, Alcaldía y Prefectura, terminada la visita, se inicia el recorrido por las calles sanareñas, donde visitan hogares de los devotos en un continuo tocar de instrumentos, cantar por parte de los coros de músicos cantores, danzar y algarabía de esta tradición festiva. Esto se realiza durante todo el día y en sus visitas a los hogares, pagan diversas promesas que los devotos tienen ofrecidas a Los santos Inocentes, reciben algunos brindis o atenciones de los creyentes, acorde a sus posibilidades.
La fiesta de Los Santos Inocentes, Los Locos o Los Zaragozas, dura todo el día (6 a. m. hasta las 6 p. m.), habiendo recorrido todo el pueblo de Oeste a Este y de Sur a Norte, vuelven a la casa de la Capitana donde se inició la celebración, allí proceden a la culminación, que se le da el nombre del encierro. La imagen de los Santos Inocentes es colocada en el altar, los músicos se sitúan frente a él y los Zaragozas que aún conservan sus máscaras proceden a quitárselas.
Al culminar esto sucede que el conjunto interpreta algunas composiciones bailables y los Zaragozas que ya no portan máscaras, sacan las mujeres a bailar.
La parte central de la fiesta de Los Zaragozas de Sanare, se inicia justamente a primeras horas de la madrugada, cuando las personas que se disfrazan, salen de diversos sitios a iniciar sus correrías por algunas calles, y luego se reúnen en casa de la capitana, el cual es el rango jerárquico de mayor altura en el proceso de la celebración. Se preparan para su inicio que lleva el nombre de rompimiento, lo cual consiste en canto de la salve, tonos y algunas oraciones frente al altar cubierto con una colcha floreada, adornado con flores y plantas, donde ha sido colocado el cuadro de los Santos Inocentes. El altar, al ritmo de música, cantos y oraciones se dirigen todos hacia la capilla de los Zaragozas, donde a las siete u ocho de la mañana aproximadamente se celebra la primera misa en la Iglesia San Isidro.
Terminada la misa, a las nueve o diez de la mañana, la multitud se dirige por la calle central de Sanare hacia la Iglesia Santa Ana en el Barrio Arriba, para cumplir con el acto religioso de ese día. Finalizada la misa de Santa Ana, se pagan unas promesas en el altozano, luego se dirigen al Anfiteatro para el Folklore y la cultura, situado frente al templo parroquial donde tocan, cantan, danzan y bailan, al mismo tiempo pagan promesas de los fieles devotos. Terminada esta parte, piden permiso al Consejo Municipal, Alcaldía y Prefectura, terminada la visita, se inicia el recorrido por las calles sanareñas, donde visitan hogares de los devotos en un continuo tocar de instrumentos, cantar por parte de los coros de músicos cantores, danzar y algarabía de esta tradición festiva. Esto se realiza durante todo el día y en sus visitas a los hogares, pagan diversas promesas que los devotos tienen ofrecidas a Los santos Inocentes, reciben algunos brindis o atenciones de los creyentes, acorde a sus posibilidades.
La fiesta de Los Santos Inocentes, Los Locos o Los Zaragozas, dura todo el día (6 a. m. hasta las 6 p. m.), habiendo recorrido todo el pueblo de Oeste a Este y de Sur a Norte, vuelven a la casa de la Capitana donde se inició la celebración, allí proceden a la culminación, que se le da el nombre del encierro. La imagen de los Santos Inocentes es colocada en el altar, los músicos se sitúan frente a él y los Zaragozas que aún conservan sus máscaras proceden a quitárselas.
Al culminar esto sucede que el conjunto interpreta algunas composiciones bailables y los Zaragozas que ya no portan máscaras, sacan las mujeres a bailar.