Francisco de Quevedo
Francisco de Quevedo, riéndose de esta supersticiosa creencia, dice: "El martes es día aciago, para los que caminan a pie, y para los que prenden."
Francisco de Quevedo, riéndose de esta supersticiosa creencia, dice: "El martes es día aciago, para los que caminan a pie, y para los que prenden."