Origen del Día Mundial de la Resiliencia en el Turismo
La creación de este día ha sido gracias a la iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas, con la finalidad de reconocer al sector turístico como una actividad multisectorial. Resalta su contribución al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el año 2030, referidos al crecimiento económico, disminución de la pobreza, creación de empleo, promoción de la cultura local, utilización sostenible de los recursos marinos, entre otros aspectos.
Por otra parte, el Centro Global de Resiliencia Turística y Gestión de Crisis (GTRCMC) lanzó este día mundial en el año 2020, en el marco de un evento celebrado en la Expo 2020, en Dubái. Con ello se pretende que los países de menores dimensiones tengan acceso a conocimientos y recursos, favoreciendo a las economías que son dependientes del turismo.
El fin último de esta efeméride es crear una conciencia global, aunando esfuerzos para fortalecer el sector turístico ante situaciones adversas, tales como desastres climáticos y la pandemia por COVID-19.
De acuerdo a cifras estimadas, el turismo fue uno de los sectores económicos más afectados por la pandemia. El Producto Interno Bruto (PIB) del sector turismo se redujo en 2,0 billones de dólares, generando una pérdida acumulada de 3,6 billones de dólares para los años 2020 y 2021. Se registró una caída abrupta del número turistas internacionales y del flujo de ingresos, entre los meses de marzo y diciembre del año 2020, estimada en un 84%.
Muchas comunidades rurales y locales se vieron afectadas, incrementando los niveles de pobreza y disminuyendo drásticamente el turismo sostenible. Sin embargo, este sector ha demostrado su capacidad de resiliencia, contribuyendo en poco tiempo al progreso de las zonas afectadas por la pandemia mundial.
La Organización de las Naciones Unidas plantea la transformación del turismo a escala mundial, enfocándose en las siguientes áreas prioritarias:
● Gestionar la crisis y mitigar el impacto socioeconómico. en aspectos como el empleo y la seguridad económica de las mujeres.
● Impulsar la competitividad y fomentar la resiliencia.
● Avanzar en la innovación y la digitalización del ecosistema turístico.
● Fomentar la sostenibilidad y el crecimiento ecológico inclusivo.
La creación de este día ha sido gracias a la iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas, con la finalidad de reconocer al sector turístico como una actividad multisectorial. Resalta su contribución al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible para el año 2030, referidos al crecimiento económico, disminución de la pobreza, creación de empleo, promoción de la cultura local, utilización sostenible de los recursos marinos, entre otros aspectos.
Por otra parte, el Centro Global de Resiliencia Turística y Gestión de Crisis (GTRCMC) lanzó este día mundial en el año 2020, en el marco de un evento celebrado en la Expo 2020, en Dubái. Con ello se pretende que los países de menores dimensiones tengan acceso a conocimientos y recursos, favoreciendo a las economías que son dependientes del turismo.
El fin último de esta efeméride es crear una conciencia global, aunando esfuerzos para fortalecer el sector turístico ante situaciones adversas, tales como desastres climáticos y la pandemia por COVID-19.
De acuerdo a cifras estimadas, el turismo fue uno de los sectores económicos más afectados por la pandemia. El Producto Interno Bruto (PIB) del sector turismo se redujo en 2,0 billones de dólares, generando una pérdida acumulada de 3,6 billones de dólares para los años 2020 y 2021. Se registró una caída abrupta del número turistas internacionales y del flujo de ingresos, entre los meses de marzo y diciembre del año 2020, estimada en un 84%.
Muchas comunidades rurales y locales se vieron afectadas, incrementando los niveles de pobreza y disminuyendo drásticamente el turismo sostenible. Sin embargo, este sector ha demostrado su capacidad de resiliencia, contribuyendo en poco tiempo al progreso de las zonas afectadas por la pandemia mundial.
La Organización de las Naciones Unidas plantea la transformación del turismo a escala mundial, enfocándose en las siguientes áreas prioritarias:
● Gestionar la crisis y mitigar el impacto socioeconómico. en aspectos como el empleo y la seguridad económica de las mujeres.
● Impulsar la competitividad y fomentar la resiliencia.
● Avanzar en la innovación y la digitalización del ecosistema turístico.
● Fomentar la sostenibilidad y el crecimiento ecológico inclusivo.