Biografía
Algunos historiadores piensan que procedía de Toledo, o incluso de Andalucía. Quizá eligió este monasterio de Liébana debido a la proximidad de Covadonga y Cosgaya, lugares que los cristianos de la época daban por milagrosos.
Beato adquirió rápidamente una reputación de gran erudición. Pasó a ser incluso durante algún tiempo preceptor y confesor de la hija de Alfonso I, la futura reina Adosinda, que se casaría con el rey Silo de Asturias, monarca desde 775 a 783.
Su notoriedad tenía también otras causas además de su Comentario al Apocalipsis. Pensador militante y enérgico, combatió a los que se comprometieron con los invasores musulmanes, comenzando por el arzobispo de Toledo Elipando de Toledo, a quien acusó de herejía por defender el adopcionismo.
Como ha destacado Eduardo Manzano Moreno, su Comentario sobre el Libro del Apocalipsis es una «interpretación de la difícil obra del apóstol San Juan. Uno de los temas que se desarrollaban en esa obra era el de la Jerusalén celeste». «Su comentario sobre el Apocalipsis adquirió una enorme resonancia y fueron numerosos los manuscritos que se hicieron de él; manuscritos muchas veces iluminados con fantásticas imágenes que componen todo un conjunto —los beatos— que constituye una de las cumbres de la iconografía medieval».
Algunos historiadores piensan que procedía de Toledo, o incluso de Andalucía. Quizá eligió este monasterio de Liébana debido a la proximidad de Covadonga y Cosgaya, lugares que los cristianos de la época daban por milagrosos.
Beato adquirió rápidamente una reputación de gran erudición. Pasó a ser incluso durante algún tiempo preceptor y confesor de la hija de Alfonso I, la futura reina Adosinda, que se casaría con el rey Silo de Asturias, monarca desde 775 a 783.
Su notoriedad tenía también otras causas además de su Comentario al Apocalipsis. Pensador militante y enérgico, combatió a los que se comprometieron con los invasores musulmanes, comenzando por el arzobispo de Toledo Elipando de Toledo, a quien acusó de herejía por defender el adopcionismo.
Como ha destacado Eduardo Manzano Moreno, su Comentario sobre el Libro del Apocalipsis es una «interpretación de la difícil obra del apóstol San Juan. Uno de los temas que se desarrollaban en esa obra era el de la Jerusalén celeste». «Su comentario sobre el Apocalipsis adquirió una enorme resonancia y fueron numerosos los manuscritos que se hicieron de él; manuscritos muchas veces iluminados con fantásticas imágenes que componen todo un conjunto —los beatos— que constituye una de las cumbres de la iconografía medieval».