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¿Cómo se diagnostica?
El trastorno de identidad disociativo (TID), anteriormente conocido como trastorno de personalidad múltiple, es un problema de salud mental en el cual la persona experimenta dos o más identidades distintas, cada una con su propio patrón de conducta. Además, la persona no puede recordar información que normalmente recordaba fácilmente, como los acontecimientos cotidianos, información personal importante y/o acontecimientos traumáticos o estresantes
Para diagnosticar el TID, los médicos realizan una meticulosa entrevista psiquiátrica y utilizan cuestionarios especiales, a veces facilitados mediante hipnosis o sedantes. Algunos de los síntomas que pueden indicar la presencia de TID incluyen:
1. Dos o más identidades: La persona afectada tiene dos o más identidades, y su sentido de ser ellas mismas y de ser capaces de actuar como tales está alterado.
2. Lagunas de memoria: La persona presenta lagunas de memoria para los acontecimientos cotidianos, información personal importante y acontecimientos traumáticos o estresantes.
3. Cambios en la autopercepción: Experimenta cambios en la percepción de sí misma.
4. Estado de trance: Puede entrar en estados de trance.
5. Despersonalización: Siente que está fuera de su propio cuerpo o que no es real.
6. Conductas inusuales: Puede mostrar comportamientos inusuales para su personalidad habitual.
7. Alteraciones del sueño: Puede experimentar problemas de sueño, como pesadillas o insomnio.
Es importante destacar que el TID es poco frecuente y se desconoce el número exacto de personas que lo padecen. La psicoterapia puede favorecer la integración de las identidades o, al menos, lograr la cooperación de las identidades existentes. Si tienes inquietudes o crees que podrías estar experimentando estos síntomas, te recomiendo buscar ayuda profesional para un diagnóstico adecuado y un tratamiento adecuado.
El trastorno de identidad disociativo (TID), anteriormente conocido como trastorno de personalidad múltiple, es un problema de salud mental en el cual la persona experimenta dos o más identidades distintas, cada una con su propio patrón de conducta. Además, la persona no puede recordar información que normalmente recordaba fácilmente, como los acontecimientos cotidianos, información personal importante y/o acontecimientos traumáticos o estresantes
Para diagnosticar el TID, los médicos realizan una meticulosa entrevista psiquiátrica y utilizan cuestionarios especiales, a veces facilitados mediante hipnosis o sedantes. Algunos de los síntomas que pueden indicar la presencia de TID incluyen:
1. Dos o más identidades: La persona afectada tiene dos o más identidades, y su sentido de ser ellas mismas y de ser capaces de actuar como tales está alterado.
2. Lagunas de memoria: La persona presenta lagunas de memoria para los acontecimientos cotidianos, información personal importante y acontecimientos traumáticos o estresantes.
3. Cambios en la autopercepción: Experimenta cambios en la percepción de sí misma.
4. Estado de trance: Puede entrar en estados de trance.
5. Despersonalización: Siente que está fuera de su propio cuerpo o que no es real.
6. Conductas inusuales: Puede mostrar comportamientos inusuales para su personalidad habitual.
7. Alteraciones del sueño: Puede experimentar problemas de sueño, como pesadillas o insomnio.
Es importante destacar que el TID es poco frecuente y se desconoce el número exacto de personas que lo padecen. La psicoterapia puede favorecer la integración de las identidades o, al menos, lograr la cooperación de las identidades existentes. Si tienes inquietudes o crees que podrías estar experimentando estos síntomas, te recomiendo buscar ayuda profesional para un diagnóstico adecuado y un tratamiento adecuado.