La mascletà
Este acto se realiza todos los días a las 14:00 horas, desde el 1 de marzo hasta el día 19. El nombre de Mascletá proviene del de un tipo de petardo, el masclet. Es uno de los actos más valorados por los valencianos, aunque también es un acto que menos entienden los visitantes, ya que para entenderlas es necesario estar próximos al lugar donde explotan los productos pirotécnicos, ya que no es cuestión de ver, sino de sentir y oír, ya que producen sensaciones similares a la audición de un concierto, consiguiendo que el estruendo envuelva, y todo en cuestión de escasos minutos (6-7) y llegando a superar los 120 decibelios.
Básicamente se componen de material terrestre y de un principio y final aéreo. No obstante estas composiciones varían según el pirotécnico. Los petardos van unidos por mechas que están envueltas en papel para que éstas vayan más rápidas. Según la variación de las mechas, los cruces de varias filas, así como la distancia de los petardos, consiguen dar mayor o menor velocidad de disparo, la cual suele ser de máxima velocidad al final de la misma obteniendo el terremoto final. También se consiguen diferentes efectos de sonoridad y sensación haciendo que exploten en el suelo o atados a las cuerdas que sujetan las mechas.
Actualmente las mascletaes que se disparan en la plaza del Ayuntamiento de Valencia, que tiene un presupuesto aproximado entre 6000 y 9000 euros, no obstante algunos pirotécnicos ponen de su parte para satisfacción del público. Los pirotécnicos que más público atraen son V. Caballer y R. Caballer.
Desde el 1 al 19 de marzo, se dispara diariamente a las 14:00. Una mascletà en la plaza del Ayuntamiento de Valencia, presidida por las Falleras Mayores y autoridades municipales además de numerosos invitados que se aglutinan en el conocido balcón del Ayuntamiento.
Este acto se realiza todos los días a las 14:00 horas, desde el 1 de marzo hasta el día 19. El nombre de Mascletá proviene del de un tipo de petardo, el masclet. Es uno de los actos más valorados por los valencianos, aunque también es un acto que menos entienden los visitantes, ya que para entenderlas es necesario estar próximos al lugar donde explotan los productos pirotécnicos, ya que no es cuestión de ver, sino de sentir y oír, ya que producen sensaciones similares a la audición de un concierto, consiguiendo que el estruendo envuelva, y todo en cuestión de escasos minutos (6-7) y llegando a superar los 120 decibelios.
Básicamente se componen de material terrestre y de un principio y final aéreo. No obstante estas composiciones varían según el pirotécnico. Los petardos van unidos por mechas que están envueltas en papel para que éstas vayan más rápidas. Según la variación de las mechas, los cruces de varias filas, así como la distancia de los petardos, consiguen dar mayor o menor velocidad de disparo, la cual suele ser de máxima velocidad al final de la misma obteniendo el terremoto final. También se consiguen diferentes efectos de sonoridad y sensación haciendo que exploten en el suelo o atados a las cuerdas que sujetan las mechas.
Actualmente las mascletaes que se disparan en la plaza del Ayuntamiento de Valencia, que tiene un presupuesto aproximado entre 6000 y 9000 euros, no obstante algunos pirotécnicos ponen de su parte para satisfacción del público. Los pirotécnicos que más público atraen son V. Caballer y R. Caballer.
Desde el 1 al 19 de marzo, se dispara diariamente a las 14:00. Una mascletà en la plaza del Ayuntamiento de Valencia, presidida por las Falleras Mayores y autoridades municipales además de numerosos invitados que se aglutinan en el conocido balcón del Ayuntamiento.