Educación
En el siglo VII la enseñanza apenas existía. No quedaba rastro de las escuelas retóricas tardorromanas ni del pedagogo vagabundo que intentó suplir su ausencia. No se había desarrollado la educación monástica y todavía faltaba mucho tiempo para el advenimiento de la escuela catedralicia carolina.
Lo habitual en aquella época era que cada erudito formara su propia academia. El maestro solía ser un obispo y los alumnos eran candidatos a recibir el sacramento sacerdotal. Por esta razón este tipo de escuela se ha conocido con el nombre de «escuela episcopal» o «escuela familiar», ya que los estudiantes solían pertenecer a la familia del obispo.
Es probable que los primeros estudios de Braulio corriesen a cargo de su padre Gregorio y su hermano Juan. Más tarde debió padecer el rigor del régimen escolar episcopal, conviviendo con sus compañeros adolescentes en una habitación de la casa bajo la dirección de una persona considerada ejemplar y encargada de hacer observar la disciplina. Los casos de rebeldía se solucionaban enviando al infractor a un monasterio para conseguir su arrepentimiento y reforma.
Su enseñanza básica debió incluir el latín, la aritmética y la Biblia. Es conocido que su hermano Juan era una autoridad en el computus, cálculo que se utilizaba para determinar con exactitud las fechas en que debía celebrarse la Pascua y las fiestas dependientes de la misma.
En el siglo VII la enseñanza apenas existía. No quedaba rastro de las escuelas retóricas tardorromanas ni del pedagogo vagabundo que intentó suplir su ausencia. No se había desarrollado la educación monástica y todavía faltaba mucho tiempo para el advenimiento de la escuela catedralicia carolina.
Lo habitual en aquella época era que cada erudito formara su propia academia. El maestro solía ser un obispo y los alumnos eran candidatos a recibir el sacramento sacerdotal. Por esta razón este tipo de escuela se ha conocido con el nombre de «escuela episcopal» o «escuela familiar», ya que los estudiantes solían pertenecer a la familia del obispo.
Es probable que los primeros estudios de Braulio corriesen a cargo de su padre Gregorio y su hermano Juan. Más tarde debió padecer el rigor del régimen escolar episcopal, conviviendo con sus compañeros adolescentes en una habitación de la casa bajo la dirección de una persona considerada ejemplar y encargada de hacer observar la disciplina. Los casos de rebeldía se solucionaban enviando al infractor a un monasterio para conseguir su arrepentimiento y reforma.
Su enseñanza básica debió incluir el latín, la aritmética y la Biblia. Es conocido que su hermano Juan era una autoridad en el computus, cálculo que se utilizaba para determinar con exactitud las fechas en que debía celebrarse la Pascua y las fiestas dependientes de la misma.