Simón Pedro en el «Nuevo Testamento»
Nombre
Todos los evangelios mencionan el nombre de Simón (en griego: Σίμων; en arameo: שמעון, romanizado: Shim'on), un nombre judío cuya raíz שמע (shamá') es "escuchar" y puede interpretarse como quien "escucha a Dios" o a quien "Dios escucha". Mateo y Juan llaman al apóstol Simón "hijo de Jonás" o "hijo de Juan", pues Mateo translitera el nombre completo desde el arameo (שמעון בר יונה) al griego (Σίμων βαρϊωνᾶ, Símōn Bariōnâ), mientras que Juan escribe el nombre propio del padre de Simón en griego (Σίμων ὁ υἱὸς Ἰωάννου, Símōn ho hyòs Iiōánnou), alejándose de su nombre nativo (יונה, Yonah).
En la historia de la llamada de los discípulos, Jesús se dirige a Simón con la palabra griega Κηφᾶς (Cefas), una forma helenizada del arameo כיפה (kefah) o כיפא (kefá), que significa "roca" o "piedra". Así pues, Jesús llama "roca" a Simón, y a continuación, el autor del Evangelio de Juan traduce el nombre arameo Kefah a sus destinatarios grecoparlantes como Pedro (πέτρος, Petros) una masculinización del griego πέτρα (petra), que significa ‘piedra’.
ἐμβλέψας αὐτῷ ὁ Ἰησοῦς εἶπεν σὺ εἶ Σίμων ὁ υἱὸς Ἰωάννου, σὺ κληθήσῃ Κηφᾶς ὃ ἑρμηνεύεται Πέτρος.
Mirándole Jesús, dijo: "Tú eres Simón, el hijo de Jonás [o "hijo de Juan"]; tú serás llamado Cefas, que quiere decir Pedro".
Juan 1:4211
Por otra parte, en sus cartas Pablo siempre llamó a Pedro con el nombre de "Cefas", excepto en un pasaje de la carta a los Gálatas. Este no habría sido un nombre propio, pero Pablo y Jesús se lo asignan como tal.
En el griego ático, petros significa 'piedra' (una piedra que se puede arrojar), y petra significa 'roca' (una roca inamovible); no obstante, el Nuevo Testamento no fue escrito en griego ático sino en koiné, en el cual no habría existido ninguna distinción entre petros y petra, sino que ambos significarían simplemente 'roca'; mientras que la palabra λίϑος (lithos), vendría a señalar una piedra del camino, que podría ser una piedra pequeña.
Griego original del Códice Sinaítico:
καγω δε ϲοι λεγω οτι ϲυ ει πετροϲ και επι ταυτη τη πετρα οικοδομηϲω μου την εκκληϲιαν και πυλαι αδου ου κατιϲχυϲουϲιν αυτηϲ
Yo también te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
Mateo 16:18
En cualquier caso, la distinción entre petros y petra, es irrelevante considerando que Jesús hablaba arameo, idioma en el cual la palabra para Petros y petra habría sido kefah, que significa roca. De esta forma, por ejemplo, en la Peshitta y el Diatessaron, escritos en idioma siríaco, una variedad del arameo, se usa la palabra ܟ݁ܺܐܦ݂ܳܐ (keepa) donde las versiones griegas usan Petros y petra.
ܐܳܦ݂ ܐܶܢܳܐ ܐܳܡܰܪ ܐ݈ܢܳܐ ܠܳܟ݂ ܕ݁ܰܐܢ݈ܬ݁ ܗ݈ܽܘ ܟ݁ܺܐܦ݂ܳܐ ܘܥܰܠ ܗܳܕ݂ܶܐ ܟ݁ܺܐܦ݂ܳܐ ܐܶܒ݂ܢܶܝܗ ܠܥܺܕ݈݁ܬ݁ܝ ܘܬ݂ܰܪܥܶܐ ܕ݁ܰܫܝܽܘܠ ܠܳܐ ܢܶܚܣܢܽܘܢܳܗ܂
Yo también te digo que tú eres Keepa, y sobre esta Keepa edificaré mi Iglesia, y las puertas del Sheol no la vencerán.
Mateo 16:18
Sin contar los pasajes anteriores, Jesús se dirige a él siempre como Simón, excepto cuando anuncia que lo negará: «Pedro, te digo que hoy mismo, antes que cante el gallo, tres veces negarás que me conoces».
Nombre
Todos los evangelios mencionan el nombre de Simón (en griego: Σίμων; en arameo: שמעון, romanizado: Shim'on), un nombre judío cuya raíz שמע (shamá') es "escuchar" y puede interpretarse como quien "escucha a Dios" o a quien "Dios escucha". Mateo y Juan llaman al apóstol Simón "hijo de Jonás" o "hijo de Juan", pues Mateo translitera el nombre completo desde el arameo (שמעון בר יונה) al griego (Σίμων βαρϊωνᾶ, Símōn Bariōnâ), mientras que Juan escribe el nombre propio del padre de Simón en griego (Σίμων ὁ υἱὸς Ἰωάννου, Símōn ho hyòs Iiōánnou), alejándose de su nombre nativo (יונה, Yonah).
En la historia de la llamada de los discípulos, Jesús se dirige a Simón con la palabra griega Κηφᾶς (Cefas), una forma helenizada del arameo כיפה (kefah) o כיפא (kefá), que significa "roca" o "piedra". Así pues, Jesús llama "roca" a Simón, y a continuación, el autor del Evangelio de Juan traduce el nombre arameo Kefah a sus destinatarios grecoparlantes como Pedro (πέτρος, Petros) una masculinización del griego πέτρα (petra), que significa ‘piedra’.
ἐμβλέψας αὐτῷ ὁ Ἰησοῦς εἶπεν σὺ εἶ Σίμων ὁ υἱὸς Ἰωάννου, σὺ κληθήσῃ Κηφᾶς ὃ ἑρμηνεύεται Πέτρος.
Mirándole Jesús, dijo: "Tú eres Simón, el hijo de Jonás [o "hijo de Juan"]; tú serás llamado Cefas, que quiere decir Pedro".
Juan 1:4211
Por otra parte, en sus cartas Pablo siempre llamó a Pedro con el nombre de "Cefas", excepto en un pasaje de la carta a los Gálatas. Este no habría sido un nombre propio, pero Pablo y Jesús se lo asignan como tal.
En el griego ático, petros significa 'piedra' (una piedra que se puede arrojar), y petra significa 'roca' (una roca inamovible); no obstante, el Nuevo Testamento no fue escrito en griego ático sino en koiné, en el cual no habría existido ninguna distinción entre petros y petra, sino que ambos significarían simplemente 'roca'; mientras que la palabra λίϑος (lithos), vendría a señalar una piedra del camino, que podría ser una piedra pequeña.
Griego original del Códice Sinaítico:
καγω δε ϲοι λεγω οτι ϲυ ει πετροϲ και επι ταυτη τη πετρα οικοδομηϲω μου την εκκληϲιαν και πυλαι αδου ου κατιϲχυϲουϲιν αυτηϲ
Yo también te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella.
Mateo 16:18
En cualquier caso, la distinción entre petros y petra, es irrelevante considerando que Jesús hablaba arameo, idioma en el cual la palabra para Petros y petra habría sido kefah, que significa roca. De esta forma, por ejemplo, en la Peshitta y el Diatessaron, escritos en idioma siríaco, una variedad del arameo, se usa la palabra ܟ݁ܺܐܦ݂ܳܐ (keepa) donde las versiones griegas usan Petros y petra.
ܐܳܦ݂ ܐܶܢܳܐ ܐܳܡܰܪ ܐ݈ܢܳܐ ܠܳܟ݂ ܕ݁ܰܐܢ݈ܬ݁ ܗ݈ܽܘ ܟ݁ܺܐܦ݂ܳܐ ܘܥܰܠ ܗܳܕ݂ܶܐ ܟ݁ܺܐܦ݂ܳܐ ܐܶܒ݂ܢܶܝܗ ܠܥܺܕ݈݁ܬ݁ܝ ܘܬ݂ܰܪܥܶܐ ܕ݁ܰܫܝܽܘܠ ܠܳܐ ܢܶܚܣܢܽܘܢܳܗ܂
Yo también te digo que tú eres Keepa, y sobre esta Keepa edificaré mi Iglesia, y las puertas del Sheol no la vencerán.
Mateo 16:18
Sin contar los pasajes anteriores, Jesús se dirige a él siempre como Simón, excepto cuando anuncia que lo negará: «Pedro, te digo que hoy mismo, antes que cante el gallo, tres veces negarás que me conoces».