Obra literaria
Artículo principal: Cántico espiritual
Influencias
En 1948 el poeta y crítico literario Dámaso Alonso pronunció una conferencia en el Instituto Caro y Cuervo titulada La poesía de san Juan de la Cruz donde se tratan las influencias de su obra poética.
Alonso divide las influencias literarias de este autor en españolas y bíblicas. Entre las españolas se encuentran canciones de la época y los escritos de Garcilaso de la Vega. Las canciones son las que el pueblo cantaba o las de ambientes más elevados, recogidas en cancioneros.
La influencia de las canciones es escasa en el Cántico espiritual y nula en Noche oscura, pero sí determina otros poemas conocidos como villancicos. El villancico se caracterizaba por empezar con un estribillo (una estrofa de dos o tres versos que es desarrollada en las estrofas siguientes) cuya última línea se repite al final de cada estrofa. El villancico más original de Juan es el que empieza diciendo Qué bien se yo la fonte que mana y corre. Este no está escrito en el popular metro octosílabo, habitual en los villancicos, sino en endecasílabos, lo cual corresponde a un estilo que acababa de ser importado de Italia.
Juan también escribió algunos romances. Entre estos está uno largo sobre la Trinidad y la Encarnación, así como su paráfrasis del salmo Super flumina Babylonis. El romance se usaba en la época para temas narrativos y se caracterizaba por el hecho de que la misma rima o asonancia se repite a lo largo de todo el poema.
Los tres poemas que más reputación como poeta le han dado son Cántico espiritual, Noche oscura y Llama de amor viva. Estos deben su existencia a Garcilaso de la Vega. Garcilaso, influenciado a su vez por Juan Boscán, escribía poemas en métrica italiana con más fluidez y musicalidad con el endecasílabo, que tenía tres sílabas más que la métrica española empleada hasta entonces. En 1543 se publicó la obra de Boscán y Garcilaso en un volumen que fue un éxito de ventas. La mayor parte de la obra de Garcilaso son églogas, canciones y sonetos de estilo renacentista, caracterizados por la artificialidad en los temas pastoriles y con un sentido refinado de la belleza.
Cuando Juan entró en los carmelitas en Medina del Campo escribió poemas en verso heroico y estilo pastoril. Tras su paso por Salamanca, abandonó todo lo que no estaba relacionado con la región, aparcando estas poesías. Sin embargo, decidió retomar la poesía posteriormente. Se sabe que leyó una obra de un poeta religioso, que escribía basándose en églogas y canciones de Garcilaso, llamado Sebastián de Córdoba, publicada en 1575. Esto fue, probablemente, lo que le hizo ver la posibilidad de escribir poemas con esta métrica sobre temas místicos. Empezaría a hacerlo durante su reclusión en Toledo.
Cántico espiritual y Noche oscura están escritos en una estrofa llamada lira, en la que Garcilaso había escrito su canción Si de mi baja la lira (también titulada Flor de Gnido). El modelo estrófico de Llama de amor viva está tomado de la Canción II de Garcilaso.
Juan también tomó de Garcilaso el lenguaje pastoril en el caso del Cántico espiritual.
Juan de la Cruz tomó influencias del libro bíblico Cantar de los cantares en especial. Para Juan, el Cantar de los cantares era una alegoría escrita por Salomón del alma que busca a Dios, de la unión mística y de la visión beatífica. El Cántico espiritual y Noche oscura son también de este tipo.
Artículo principal: Cántico espiritual
Influencias
En 1948 el poeta y crítico literario Dámaso Alonso pronunció una conferencia en el Instituto Caro y Cuervo titulada La poesía de san Juan de la Cruz donde se tratan las influencias de su obra poética.
Alonso divide las influencias literarias de este autor en españolas y bíblicas. Entre las españolas se encuentran canciones de la época y los escritos de Garcilaso de la Vega. Las canciones son las que el pueblo cantaba o las de ambientes más elevados, recogidas en cancioneros.
La influencia de las canciones es escasa en el Cántico espiritual y nula en Noche oscura, pero sí determina otros poemas conocidos como villancicos. El villancico se caracterizaba por empezar con un estribillo (una estrofa de dos o tres versos que es desarrollada en las estrofas siguientes) cuya última línea se repite al final de cada estrofa. El villancico más original de Juan es el que empieza diciendo Qué bien se yo la fonte que mana y corre. Este no está escrito en el popular metro octosílabo, habitual en los villancicos, sino en endecasílabos, lo cual corresponde a un estilo que acababa de ser importado de Italia.
Juan también escribió algunos romances. Entre estos está uno largo sobre la Trinidad y la Encarnación, así como su paráfrasis del salmo Super flumina Babylonis. El romance se usaba en la época para temas narrativos y se caracterizaba por el hecho de que la misma rima o asonancia se repite a lo largo de todo el poema.
Los tres poemas que más reputación como poeta le han dado son Cántico espiritual, Noche oscura y Llama de amor viva. Estos deben su existencia a Garcilaso de la Vega. Garcilaso, influenciado a su vez por Juan Boscán, escribía poemas en métrica italiana con más fluidez y musicalidad con el endecasílabo, que tenía tres sílabas más que la métrica española empleada hasta entonces. En 1543 se publicó la obra de Boscán y Garcilaso en un volumen que fue un éxito de ventas. La mayor parte de la obra de Garcilaso son églogas, canciones y sonetos de estilo renacentista, caracterizados por la artificialidad en los temas pastoriles y con un sentido refinado de la belleza.
Cuando Juan entró en los carmelitas en Medina del Campo escribió poemas en verso heroico y estilo pastoril. Tras su paso por Salamanca, abandonó todo lo que no estaba relacionado con la región, aparcando estas poesías. Sin embargo, decidió retomar la poesía posteriormente. Se sabe que leyó una obra de un poeta religioso, que escribía basándose en églogas y canciones de Garcilaso, llamado Sebastián de Córdoba, publicada en 1575. Esto fue, probablemente, lo que le hizo ver la posibilidad de escribir poemas con esta métrica sobre temas místicos. Empezaría a hacerlo durante su reclusión en Toledo.
Cántico espiritual y Noche oscura están escritos en una estrofa llamada lira, en la que Garcilaso había escrito su canción Si de mi baja la lira (también titulada Flor de Gnido). El modelo estrófico de Llama de amor viva está tomado de la Canción II de Garcilaso.
Juan también tomó de Garcilaso el lenguaje pastoril en el caso del Cántico espiritual.
Juan de la Cruz tomó influencias del libro bíblico Cantar de los cantares en especial. Para Juan, el Cantar de los cantares era una alegoría escrita por Salomón del alma que busca a Dios, de la unión mística y de la visión beatífica. El Cántico espiritual y Noche oscura son también de este tipo.