Autor
Alfredo SÁNCHEZ GARZÓN
El trayecto se halla estructurado en ocho tramos, bien establecidos por la
tradición y que se hallan señalizados por unos rechonchos
pilones de obra, denominados "descansaderos", que sirven para apoyar las andas tras cada recorrido. En el primer descansadero se realiza el denominado "censo del ajuar", donde las autoridades de
Algarra y responsables de la cofradía santeronera firman un documento con el recuento de las joyas de la
Virgen. Luego se cambias las andas de la Virgen por otras más ligeras y tras el rezo de una Salve se reemprende el
camino. Para algunos no es más que un día de
fiesta mundano, una
excursión en pleno hábitat natural. Sin embargo, a poco que se profundice, puede palparse el encanto y la magia del rico simbolismo que encierra tan singular acontecimiento mariano.