Mi padre tenía una tía en Algarra, a la que llamaban Rogelia Sánchez Garrido (1870-1963), hermana de mi abuelo Román de Torrebaja. Cuando yo la conocí, la tía de mi padre era ya muy anciana y vivía en una casona enorme con una hija llamada Isabel Zafrilla Sánchez (1898-1989), casada con un tal José Pérez Pérez (1915-97) y sin hijos: la vivienda tenía por detrás una balconada de madera que daba sobre un precipicio, como las casas colgadas de Cuenca... Isabel tenía un hermano, Vicente Zafrilla Sánchez (a) el Cojo de Algarra, casado con una señora de Torrebaja, el cual vivía en Talayuelas (Cuenca) y tenía varios hijos: Alberto, Berta, Carmen, Isabel, Leonor, Luis, Vicente... La anciana señora Rogelia padecía algún tipo de demencia, porque recuerdo que no hacía más que preguntarme una y otra vez quién era yo, cómo me llamaba, de quién era... La señora Rogelia era viuda de Mariano Zafrilla Garrido (1843-1907) y del hermano de su marido, un tal Segundo, con el que no tuvo hijos; pues, para preservar la herencia familiar, a la muerte de su primer marido se casó con su cuñado.