Todos llegamos tarde o temprano a que nos tape la tierra, ante esta realidad no hay grandes ni pequeño, ni jovenes ni viejos todos lloramos a lo nuestros.
Mi negocio va bien, gracias por preocuparte por el, ¿te pregunto yo a ti como pierdes tu tiempo?, aunque ya veo que lo pierdes con un descerebrado que se mete una chapa de refresco entre su calcetín y su píe para acordarse de las cosas, eso dice mucho de ti, perderlo con un viejo que chochea es un acto de caridad
MR
Ahora si entiendo, hoy le toca a la parienta quitarse la mano