Amigo Agustín,
Veo que lamentas el hecho que Belmonte haya perdido el 50% de su patrimonio histórico. Esto demuestra que el hombre es igual en todas partes, cada vez más retrógrado, ya sea por el caciquismo o por cualquier otra causa.
Se ha dicho siempre que los pueblos de América no tienen historia, al menos no tanto como la vieja España, por eso no valoran las construcciones de la Colonia. Sin ir más lejos, aquí se le ocurrió a una caterva de munícipes derribar la Biblioteca Nacional, que era un edificio de piedra construido a finales del siglo XIX, para dejar el solar como aparcamiento de vehículos.
Ahora se ve en pleno centro de la capital el antiguo muro con unas vigas de hierros de 5 metros de altura, completamente oxidadas. Esto fue hace 40 años; siempre lo he tenido como modelo de bárbaros (como Atila) que no aprecian su historia ni las obras de sus antepasados.
Leyendo lo que cuentas de Belmonte, debo quedarme callado porque mi gente es igual que ésta, o tal vez peor, porque si los munícipes, con seguridad, eran una mezcla de blanco con indio, pues odiaban todo lo que había hecho el hombre blanco, ¿En Belmonte pasa igual?
Un abrazo
Vicente
Veo que lamentas el hecho que Belmonte haya perdido el 50% de su patrimonio histórico. Esto demuestra que el hombre es igual en todas partes, cada vez más retrógrado, ya sea por el caciquismo o por cualquier otra causa.
Se ha dicho siempre que los pueblos de América no tienen historia, al menos no tanto como la vieja España, por eso no valoran las construcciones de la Colonia. Sin ir más lejos, aquí se le ocurrió a una caterva de munícipes derribar la Biblioteca Nacional, que era un edificio de piedra construido a finales del siglo XIX, para dejar el solar como aparcamiento de vehículos.
Ahora se ve en pleno centro de la capital el antiguo muro con unas vigas de hierros de 5 metros de altura, completamente oxidadas. Esto fue hace 40 años; siempre lo he tenido como modelo de bárbaros (como Atila) que no aprecian su historia ni las obras de sus antepasados.
Leyendo lo que cuentas de Belmonte, debo quedarme callado porque mi gente es igual que ésta, o tal vez peor, porque si los munícipes, con seguridad, eran una mezcla de blanco con indio, pues odiaban todo lo que había hecho el hombre blanco, ¿En Belmonte pasa igual?
Un abrazo
Vicente
Hola Vicente es de bien nacidos el ser agradecido y dejar algo para los que vengan y les guste la historia