Hola muchachos,
Eufra7, me agrada saludarte y te agradezco que aún te acuerdes de mí. Te felicito las Pascuas por adelantado.
Gracias por lo elogios Agustín. Ya he probado lo que es la docencia. Tradicionalmente el maestro de escuela ha pasado hambre. Sigue pasándola con una agravant¨: ahora con el Internet, no les puedes llamar la atención a los alumnos porque inmediatamente envían un e-mail y te acusan de cualquier cosa, que se acumula en tu expediente.
La universidades privadas abundan aquí; para 4 millones de habitantes hay 56 universidades privadas y 4 estatales. Por definición, todo aquel que puede pagar, asiste una universidad y es el dueño y señor de las aulas. Algunos llegan a oir música en auriculares, otros llegan a conversar y otros a hacerse arrumacos. Lega un momento en que el profesor no aguanta y suelta alguna cuchufleta.
Hace poco solté aquello de "Al que Natura no se lo da, Salamanca no se lo presta", y me ha llovido. Definitivamente considero mejor el estudio autodidáctico, es más provechoso y meritorio.
Un abrazo,
Vicente
Eufra7, me agrada saludarte y te agradezco que aún te acuerdes de mí. Te felicito las Pascuas por adelantado.
Gracias por lo elogios Agustín. Ya he probado lo que es la docencia. Tradicionalmente el maestro de escuela ha pasado hambre. Sigue pasándola con una agravant¨: ahora con el Internet, no les puedes llamar la atención a los alumnos porque inmediatamente envían un e-mail y te acusan de cualquier cosa, que se acumula en tu expediente.
La universidades privadas abundan aquí; para 4 millones de habitantes hay 56 universidades privadas y 4 estatales. Por definición, todo aquel que puede pagar, asiste una universidad y es el dueño y señor de las aulas. Algunos llegan a oir música en auriculares, otros llegan a conversar y otros a hacerse arrumacos. Lega un momento en que el profesor no aguanta y suelta alguna cuchufleta.
Hace poco solté aquello de "Al que Natura no se lo da, Salamanca no se lo presta", y me ha llovido. Definitivamente considero mejor el estudio autodidáctico, es más provechoso y meritorio.
Un abrazo,
Vicente
Los elogios a la larga pasan factura por que los humanos somos asi que hoy te suben y mañana te tiran al barro.