MR
Ahora si se explica todo, la piezas se están colocando en su lugar. Haciendo número, tienes aproximadamente 54 años, te llevo 10 que, a estas altuiras de la vida es muy poco.
Mis, llamémosles, amigos de juventud dieron sus primeras galopadas delante de los grises, por la calle Alberto Aguilera en el 64-65. Y... si, los envidiaba de la misma forma que un niño hambriento desea un pastel que está detras de un escaparate. Esa envidia es un motivador para luchar.
Me resentí con ellos... también. En esa época aprendí que la amistad es algo circunstacial. Los mensajes públicos no me inquietan porque, en España, los que me puedan (que lo dudo) recordar les importo un pepino. En Costa Rica los que me conocen desde hace 42 años me aceptan como soy y los que no me conocen bien dirán: ¡qué español tan mal criado!, pero ya tengo callo, es decir, no tengo inhibiciones.
Ahora, aunque brinques y te ofusques y solo para divertirme, te voy a decir una cosa.
Primera: debes reconsiderar eso de que sólo te bajas los pantalones delante de tu esposa. Yo pensaba igual hasta que me salió una verruga en una nalga y tuve que bajármelos delante de un hombre. Previamente le advertí, al médico, que me había puesto colonia de Paco Rabán para que no se desmayara. Lo que pudo haber sido una situación embarazosa se convirtió en diez minutos de risa. Prepárate para cuando te llegue la hora.
Saludos
Vicente
Ahora si se explica todo, la piezas se están colocando en su lugar. Haciendo número, tienes aproximadamente 54 años, te llevo 10 que, a estas altuiras de la vida es muy poco.
Mis, llamémosles, amigos de juventud dieron sus primeras galopadas delante de los grises, por la calle Alberto Aguilera en el 64-65. Y... si, los envidiaba de la misma forma que un niño hambriento desea un pastel que está detras de un escaparate. Esa envidia es un motivador para luchar.
Me resentí con ellos... también. En esa época aprendí que la amistad es algo circunstacial. Los mensajes públicos no me inquietan porque, en España, los que me puedan (que lo dudo) recordar les importo un pepino. En Costa Rica los que me conocen desde hace 42 años me aceptan como soy y los que no me conocen bien dirán: ¡qué español tan mal criado!, pero ya tengo callo, es decir, no tengo inhibiciones.
Ahora, aunque brinques y te ofusques y solo para divertirme, te voy a decir una cosa.
Primera: debes reconsiderar eso de que sólo te bajas los pantalones delante de tu esposa. Yo pensaba igual hasta que me salió una verruga en una nalga y tuve que bajármelos delante de un hombre. Previamente le advertí, al médico, que me había puesto colonia de Paco Rabán para que no se desmayara. Lo que pudo haber sido una situación embarazosa se convirtió en diez minutos de risa. Prepárate para cuando te llegue la hora.
Saludos
Vicente
Eres divino para las matemáticas Sr. Vicente