Comentario a esta fotografía
No me cansare de ensalzar el gusto de esta mujer tan dispuesta a dejar constancia de los muebles que ve y que se prestan hacerles una fotografía.
A veces me atrevo otras me quedo como corto y digo no le hago ningún comentario, pero esta fotografía me trae muchos recuerdos y no es porque yo la haya visto como tampoco me he asentado en ella, pero te digo que en todas las casas de la villa de Belmonte de Cuenca solía haber una reproducción de este mueble llamado Banca y no eran todas iguales.
La Banca normalmente estaban en el comedor y han sido las abuelas de los tresillos modernos, pues yo esto lo sé porque la mayoría de las noches me hacia mi madre la cama en la banca que teníamos en la cocina y allí me acostumbre a dormir.
Cuantas veces venia la vecina Pilar (La abuela de la Alcaldesa de Belmonte doña Ageustias y tocaba en los cristales y le decía yo a mi madre ha llamado la Sra. Pilar) con esta familia teníamos un trato familiar lo mismo que con todos sus hijos, esta la Pilar estaba casada por segunda vez y de los dos matrimonios tenía seis hijos 4chicos y dos chicas. eran dos mitades.
Mi madre era una mujer que tenía el habito de escuchar junto con la paciencia en sumo grado, cuando la Sra. Pilar salía de mi casa de hablar con mi madre iba todo calmada. Una buena mujer siempre da Paz.
No me cansare de ensalzar el gusto de esta mujer tan dispuesta a dejar constancia de los muebles que ve y que se prestan hacerles una fotografía.
A veces me atrevo otras me quedo como corto y digo no le hago ningún comentario, pero esta fotografía me trae muchos recuerdos y no es porque yo la haya visto como tampoco me he asentado en ella, pero te digo que en todas las casas de la villa de Belmonte de Cuenca solía haber una reproducción de este mueble llamado Banca y no eran todas iguales.
La Banca normalmente estaban en el comedor y han sido las abuelas de los tresillos modernos, pues yo esto lo sé porque la mayoría de las noches me hacia mi madre la cama en la banca que teníamos en la cocina y allí me acostumbre a dormir.
Cuantas veces venia la vecina Pilar (La abuela de la Alcaldesa de Belmonte doña Ageustias y tocaba en los cristales y le decía yo a mi madre ha llamado la Sra. Pilar) con esta familia teníamos un trato familiar lo mismo que con todos sus hijos, esta la Pilar estaba casada por segunda vez y de los dos matrimonios tenía seis hijos 4chicos y dos chicas. eran dos mitades.
Mi madre era una mujer que tenía el habito de escuchar junto con la paciencia en sumo grado, cuando la Sra. Pilar salía de mi casa de hablar con mi madre iba todo calmada. Una buena mujer siempre da Paz.