Al maestro Fray Luís de León se le ha querido encasillar como el príncipe de la LIRICA pero esto que puede ser cierto, no es ni mucho menos completo por la hondura de su prosa, no es menos cierto que se sabe la fuente en la cual abrevo el insigne agustino como son la Sagradas Escrituras, estas son como una fuente de agua viva donde han ido muchos a beber, pero cada uno luego elabora su producto con las facultades naturales que tiene.