Fray Luis de León no nos deja demasiados escritos que nos hablen de su lugar de nacimiento solamente lo menciona en sus declaraciones al santo oficio donde dice que es de Belmonte de la Mancha, más información nos deja Francisco Pacheco que hace una semblanza cabal de su persona y por ella nos debemos de guiar y por sus escritos.
En esto como en otras cosas sigue la línea de los clásicos y es que el hombre sabio no debe de hablar de si mismo ni de sus cosas personales. Tampoco en sus escritos deja ningún resquicio por donde podamos sacar conclusiones, solamente hace alusión a su salud que parece que no la tuvo muy boyante y en el libro de Job nos habla de ello.
Vemos en San Agustín que con mil años de diferencia por medio en sus Confesiones nos deja muchos de sus rasgos personales.
En esto como en otras cosas sigue la línea de los clásicos y es que el hombre sabio no debe de hablar de si mismo ni de sus cosas personales. Tampoco en sus escritos deja ningún resquicio por donde podamos sacar conclusiones, solamente hace alusión a su salud que parece que no la tuvo muy boyante y en el libro de Job nos habla de ello.
Vemos en San Agustín que con mil años de diferencia por medio en sus Confesiones nos deja muchos de sus rasgos personales.