Estamos contemplando esta fotografía la cual nos deja anonadados de la belleza que llegaron a construir en lo alto del cerro de San Cristobal proximo a la villa de Belmonte de Cuenca.
Cuentan que antes de este monumento hubo otro aunque no de la dimensiones que este tiene, esto nos lleva a pensar que estas tierras fueron muy condiciadas por la nobleza de aquella época, pues figuremonos por un momento la gente que participaria en levantar tan gran monumento, y además se hizo con los adelantos de la época para emplazar los cañones de artilleria que pensaban poner en todo su recinto.
Ademas de los obreros, tambien hemos de contar con los que sacaban la piedra de la cantera del Rayo y los que traian la piedra con sus carretas de bueyes, pues esta maravilla no quedo totalmente terminada hasta que no vino a viviir a ella doña Eugenia de Montijo, esposa del emperador Napoleon III rey de los franceses.
Una vez enviudo vino a vivir aquí y termino lo que quedaba del almenado incluso construyo el corredor de ladrillos que vemos en el patio de armas del mismo y que da haceso a las habitaciones.
Tambien parece que doña Eugenia trajo una comunidad de frailes para que ocuparan el castillo, pero estos duraron muy poco.
El castillo ha estado largas temporadas sin habitar nadie en el, pero nosotros hemos conocido aquí la academia de Onesimo Redondo que es cuando se hizo el campo de Futbol para lo juegos y tablas de gimnasia llevadas acabo por la gente de esta academia.
Ahora el castillo luce su mejor imagen después de haber pasado largos años dormido y una de las cosas con las que ha contado es con la limpieza de los aposentos de sus cuevas que estaban cegadas por la basura que se fue acumulado en ellas al paso del tiempo.
Cuentan que antes de este monumento hubo otro aunque no de la dimensiones que este tiene, esto nos lleva a pensar que estas tierras fueron muy condiciadas por la nobleza de aquella época, pues figuremonos por un momento la gente que participaria en levantar tan gran monumento, y además se hizo con los adelantos de la época para emplazar los cañones de artilleria que pensaban poner en todo su recinto.
Ademas de los obreros, tambien hemos de contar con los que sacaban la piedra de la cantera del Rayo y los que traian la piedra con sus carretas de bueyes, pues esta maravilla no quedo totalmente terminada hasta que no vino a viviir a ella doña Eugenia de Montijo, esposa del emperador Napoleon III rey de los franceses.
Una vez enviudo vino a vivir aquí y termino lo que quedaba del almenado incluso construyo el corredor de ladrillos que vemos en el patio de armas del mismo y que da haceso a las habitaciones.
Tambien parece que doña Eugenia trajo una comunidad de frailes para que ocuparan el castillo, pero estos duraron muy poco.
El castillo ha estado largas temporadas sin habitar nadie en el, pero nosotros hemos conocido aquí la academia de Onesimo Redondo que es cuando se hizo el campo de Futbol para lo juegos y tablas de gimnasia llevadas acabo por la gente de esta academia.
Ahora el castillo luce su mejor imagen después de haber pasado largos años dormido y una de las cosas con las que ha contado es con la limpieza de los aposentos de sus cuevas que estaban cegadas por la basura que se fue acumulado en ellas al paso del tiempo.