Comentario
Llegaron a casa de don Alonso Quijano y este no quiso llamar por la puerta principal y fue a entrar por las portadas que siempre la puerta estaba nada más que con el picaporte echado.
Fueron los dos a ver a Rocinante y el caballo movió la cabeza al ver a Sancho como diciéndole que aceptaba su visita.
Llegaron a casa de don Alonso Quijano y este no quiso llamar por la puerta principal y fue a entrar por las portadas que siempre la puerta estaba nada más que con el picaporte echado.
Fueron los dos a ver a Rocinante y el caballo movió la cabeza al ver a Sancho como diciéndole que aceptaba su visita.