Comentario
Don Alonso Quijano se echo mano al bolsillo para estar seguro que había cogido el recibo ya que había dejado 100 maravedíes por la gargantilla que había encargado para su doncella Dulcinea de Toboso, y que dentro de quince días tendría que pasar a recogerla, don Alonso Quijano le dijo a Sancho que cuando pasara quince días tendrían que volver a las Torres de Juan Abad para recoger lo que había encargado,
Sancho le dijo a don Alonso Quijano que se haría un nudo en el pañuelo para que no se le olvidase, y don Alonso Quijano le dijo; y si lo pierdes, descuide su merced porque este siempre lo llevo atado con una cadena a los pantalones.
Don Alonso Quijano se echo mano al bolsillo para estar seguro que había cogido el recibo ya que había dejado 100 maravedíes por la gargantilla que había encargado para su doncella Dulcinea de Toboso, y que dentro de quince días tendría que pasar a recogerla, don Alonso Quijano le dijo a Sancho que cuando pasara quince días tendrían que volver a las Torres de Juan Abad para recoger lo que había encargado,
Sancho le dijo a don Alonso Quijano que se haría un nudo en el pañuelo para que no se le olvidase, y don Alonso Quijano le dijo; y si lo pierdes, descuide su merced porque este siempre lo llevo atado con una cadena a los pantalones.