Panaderías -25% €/kWh
Comentario
EL VADO DEL RIO:
El vado es la parte del río que es atravesada por un camino, en el cual no hay puente, suele ser poco profundo pero en el suelo del río suele haber cieno o barro fétido, ahora en casi todos los paso de río que son muy transitados suele haber puentes.
En los vados antes había piedras puestas en el río para que la gente de a pie los cruzara sin tener que mojarse con el agua del río, quien no a cruzado alguna vez el río por estas piedras, los que ya tenemos cierta edad lo hemos hechos infinidad de veces, y nos causaba cierto placer.
Cuentan los biógrafos de Teresa de Ahumada, más tarde (Santa Teresa de Jesús) que yendo por los pueblos de España creando sus fundaciones de conventos religiosos, tuvo que cruzar uno de estos vados y la carreta tirada por bueyes se atasco en el VADO, pues dicen que un poco enfadada hecho pie al agua con él habito arremangado hasta la cintura con el fin de apretar en la rueda de la carreta.
Pues era tal su ímpetu que se resbalo y sé cayo al agua en cuerpo y alma y no veas, ella que esperaba no mojarse más que las pantorrillas se mojo toda completa, y se cabreo mucho como era de esperar, y no dijo nada pero miro << de una forma>> hacia el cielo, y dicen que oyó en su interior una voz que le dijo << Así trato yo a los míos>> pues ella en vez de callarse, dijo << Por eso tienes tampocos>> y no volvió a tener respuesta.
La Villa de Belmonte es un ejemplo de lo que profetizo Teresa de Ahumada, que cada vez tendría menos seguidores de primera línea, aquí en la Villa de Belmonte hubo dos conventos de monjitas y uno de frailes trinitarios, y que queda de esto, nada, es una pena.
Poco a poco hasta los edificios se han caído o se han ido trasformando para otras funciones, pero no para las que fueron creados, en la Villa de Belmonte había que preguntarse porque ha sucedido esto.
Claro que la respuesta la encontraríamos en el gran cambio que ha llevado a cabo esta sociedad moderna, pero cada vez también vemos que salen más vocaciones y son más autenticas y están mejores preparadas.
Quiero estar contigo
Al lado de tu cruz
Siendo fiel testigo
De tu divina luz.
Aumenta mi fuerza
Aliviando mi dolor
Sin sentir flaqueza
Y refuerza mi valor.
La Fe en la oración
Será perseverante
Y me dará la ilusión
Para seguir adelante.
La Caridad es virtud
Que nos da alegría
Alejando la acritud
Para vivir en armonía.
Camino de Esperanza
En el cielo prometido
A todos nos alcanza
Y Cristo no ha mentido.
Más la furia se desata
Y llega la apostasía
Terror del papanatas
Engañado por la fantasía.
EL VADO DEL RIO:
El vado es la parte del río que es atravesada por un camino, en el cual no hay puente, suele ser poco profundo pero en el suelo del río suele haber cieno o barro fétido, ahora en casi todos los paso de río que son muy transitados suele haber puentes.
En los vados antes había piedras puestas en el río para que la gente de a pie los cruzara sin tener que mojarse con el agua del río, quien no a cruzado alguna vez el río por estas piedras, los que ya tenemos cierta edad lo hemos hechos infinidad de veces, y nos causaba cierto placer.
Cuentan los biógrafos de Teresa de Ahumada, más tarde (Santa Teresa de Jesús) que yendo por los pueblos de España creando sus fundaciones de conventos religiosos, tuvo que cruzar uno de estos vados y la carreta tirada por bueyes se atasco en el VADO, pues dicen que un poco enfadada hecho pie al agua con él habito arremangado hasta la cintura con el fin de apretar en la rueda de la carreta.
Pues era tal su ímpetu que se resbalo y sé cayo al agua en cuerpo y alma y no veas, ella que esperaba no mojarse más que las pantorrillas se mojo toda completa, y se cabreo mucho como era de esperar, y no dijo nada pero miro << de una forma>> hacia el cielo, y dicen que oyó en su interior una voz que le dijo << Así trato yo a los míos>> pues ella en vez de callarse, dijo << Por eso tienes tampocos>> y no volvió a tener respuesta.
La Villa de Belmonte es un ejemplo de lo que profetizo Teresa de Ahumada, que cada vez tendría menos seguidores de primera línea, aquí en la Villa de Belmonte hubo dos conventos de monjitas y uno de frailes trinitarios, y que queda de esto, nada, es una pena.
Poco a poco hasta los edificios se han caído o se han ido trasformando para otras funciones, pero no para las que fueron creados, en la Villa de Belmonte había que preguntarse porque ha sucedido esto.
Claro que la respuesta la encontraríamos en el gran cambio que ha llevado a cabo esta sociedad moderna, pero cada vez también vemos que salen más vocaciones y son más autenticas y están mejores preparadas.
Quiero estar contigo
Al lado de tu cruz
Siendo fiel testigo
De tu divina luz.
Aumenta mi fuerza
Aliviando mi dolor
Sin sentir flaqueza
Y refuerza mi valor.
La Fe en la oración
Será perseverante
Y me dará la ilusión
Para seguir adelante.
La Caridad es virtud
Que nos da alegría
Alejando la acritud
Para vivir en armonía.
Camino de Esperanza
En el cielo prometido
A todos nos alcanza
Y Cristo no ha mentido.
Más la furia se desata
Y llega la apostasía
Terror del papanatas
Engañado por la fantasía.