BELMONTE: Reflexión...

Reflexión

Despertar

Vamos a tratar este tema desde la experiencia que dan los años y vemos la importancia que tiene la educación a edad temprana, el hombre es un animal racional, o sea que si no se le educa con maestro se desarrollara según la ley natural que se va imprimiendo en el interior del hombre según vaya experimentando las cosas y conviviendo con otras personas.

He visto a hombres que nunca pisaron una escuela, pero sí convivieron con hombres desde su tierna edad y en la medida que se han desarrollado y han llegado a la edad de la adolescencia han sido un dechado de originalidad y al mismo tiempo ordenados en todo cuanto realizaban llegando a ser unos verdadero hombres de hábitos personales que son dignos de admirar, aunque en el plano intelectual no hayan llegado a saber nada más que mal escribir. Pero en el plano personal y sabiendo saber lo que una persona puede necesitar para arreglarse en la vida por si misma son personas muy digna de valorar y de imitar.

Claro por otra parte vemos a jóvenes que desde un principio tuvieron maestros esto alcanzaran un elevado desarrollo en muchas artes por ejemplo: Vemos a los príncipes don Felipe y don Juan de Austria que tuvieron el maestro que su padre el emperador Carlos quinto de Austria eligió para maestro de sus hijos que fue don Luis de Zúñiga, que les enseñó el manejo de la espada y los modales que tenían que adoptar en la sociedad, y sobre todo supo imprimir en los príncipes estos consejos “ disimular sus deseos y reprimir sus emociones.

Estos dos hermanos si no hubiese recibido tal educación hubiese alcanzado lo que hubiese dado de si su personalidad. Nosotros los hijos de la posguerra solo alcanzamos los conocimientos primarios saber leer y las cuatro reglas y después a los diez años nos pusieron a trabaja para ayudar al cabeza de familia y llevar más dinero a casa, pero tengo que escribir una observación que siempre vi en el trabajo y que no me quede con las ganas de saber, porque hice varias preguntas a diferentes personas y todas me decían lo mismo que habían ido a los seminarios de curas, y esto era una forma de adquirir conocimientos y las familias que tenían una vida desahogada en lo económico mandaban alguno de la familia a estudiar para cura, aunque luego no fuera cura, pero intelectualmente habían alcanzó conocimientos, y cuando vino la revolución industrial se colocaban en las empresas de administrativos.

Mi caso fue todo lo contrario yo tenía vocación para a verme ido al seminario, pero mi madre me dijo que había que trabajar para llevar dinero a casa, por este motivo llegue a observa que en Seat donde trabajé durante cuarenta y dos años observe que el que tenía unos pocos estudios alcanzaba algunos puestos de administrativos y se labraban de ir a trabajar en la líneas.

Una vez estaban hablando de los estudios y había uno que decía que los estudios nos servían para nada, en esto que salió el jefe y dijo: siempre el aceite se queda encima del agua, buena respuesta.

18-08-24