BELMONTE: Sangre egregia de generaciones, que en AMOR plebeyo...

Sangre egregia de generaciones, que en AMOR plebeyo quieres fundir tus raíces, vuestro pueblo unido os desea larga vida para amaros, y pide solemnemente a los hados, QUE LOS HOY PRINCIPES DE ASTURIAS por vuestra unión del sacramento cristiano del matrimonio sea vuestra estirpe abundante y fecunda y que vuestra sangre se funda en el crisol de la ESPERANZA para dar a este vuestro reino que es ESPAÑA rectos varones y mujeres de virtudes cristianas QUE testimonien nuestra Fe, que es la vuestra la que hoy habéis comprometido con vuestra palabra y delante del Mundo entero. Y si así lo cumpliereis seáis premiados, y de vuestro pueblo respetados.

Príncipes unidos por el cincel de la cultura, dispuestos a unir vuestra voluntad compartida en beneficio de un pueblo que el destino ha puesto en vuestras manos, mostraros como sois con llaneza, lealtad y en verdad, para haceros acreedores de estas gentes que os quiere como sois, que os han visto nacer sintiendo esa añoranza de ver crecer día a día vuestro amor que es el de ESPAÑA, que honra quiere y llora en silencio por las almas de sus muertos, que la barbarie del terror cruel sembrando de dolor tantos hogares de nuestra querida tierra.

El pueblo os ha visto nacer en buena hora y al mundo hoy sois presentados por los medios de comunicación desde nuestra PATRIA desde el mismo corazón que es Madrid, la capital de ESPAÑA dando testimonio de nuestra historia al mundo entero y a todos nuestros hermanos de las republicas AMERICANAS, donde nos fundimos en un santo mestizaje que no siempre supimos estar a la altura y valorar, son nuestros hermanos tiene nuestra sangre y nuestras costumbres son hijos también de nuestra querida España, porque la siente, y la cual quieren por igual a todos sus hijos salidos de sus lomos, y que fueron engendrados con AMOR y que hoy vemos el mestizaje fundido con sangre ESPAÑOLA.

La Reina Santa Isabel de Castilla, así lo concibió y lo dejo escrito en su legado para la historia, que vosotros PRÍNCIPES DE ASTURIAS recogéis hoy el testigo que legitima la historia, y que por mucha diversidad de partidos que haya la MONARQUÍA esta viva es la INSTITUCIÓN que aglutina creencias, ideas, pensamientos, naciones, pueblos, lenguas y realidades, corrigiendo y moderando desigualdades, frenando las aspiraciones del separatismos cruel y empobrecedor de una minoría que busca fraccionar y desmembrar la unidad de la Patria que es ESPAÑA con la palabrería de la dialéctica de la locura y el desatino.

Que las minorías sean escuchadas en sus planteamientos de Unidad y en su buen hacer y que el sentido común de la mayoría se imponga ante los dislates que hoy tenemos que oír en los medios de comunicación llenos de hipocresía y deslealtad con campañas de mentalización y planteamiento decadentes vividos en otros periodos de nuestra historia de reinos de taifas, la MONARQUIA es garante de la libertad, de la conciencia humana contra las desigualdades de sus pueblos para corregir sin desequilibrar pero atenta siempre a la vida política y a su moderación, estas son las exigencias de los nuevos tiempos.

Hoy hemos visto al príncipe Felipe, fiel reflejo de un pueblo castizo y sencillo con una buena preparación un respeto exquisito al hombre que lleva dentro y que por su naturaleza y sencillez se hace querer, no en vano podemos decir que al igual que el rey Prudente Felipe II, que tuvo una hermosa y buena madre.

Nuestro Príncipe también puede hacer gala de su madre, nuestra REINA, que se ha esmerado en su buena educación, con el cariño y el develo de una esposa y siendo una buena madre y una recta reina, que si no es de esta tierra nacida, si es Española por su virtudes naturales y es que estas se aprende en la cuna.

Y como aquella otra reina Doña Juana Enríquez de Castilla esposa de Juan de Aragón que supo educar a su hijo Fernando V, el Católico, en la virtudes cristianas y que luego fue el esposo de la reina Santa Isabel I de Castilla, la cual supo compaginar el deber de esposa y madre con sus deberes de Reina, aquí tenemos nuestro modelos a seguir.

Esta nuestra reina Doña Sofía de Grecia, que también entrará en la historia por sus virtudes, que hoy podemos ver en sus hijos y que no exenta de sentimientos reales sabe llorar a los hijos los de ESPAÑA muertos.