Reflexión
El pueblo de Valencia pierde los nervios ante la gran tragedia de la DANA.
Es normal que el pueblo pierda los nervios al sentirse olvidado a primera hora y cuando llegan es tarde y los ciudadanos se queja y suelen perder la compostura y tiran de los primero que encuentran que es el barro, y no reconoce la autoridad porque esta ha reaccionado tarde, aunque no haya tenido la culpa.
Esto será una experiencia que constará en los registros para el que venga después que no tarde en presentar su avales y será creído ante la gran catástrofe que nadie la llamo, pero ella se hizo presente, estos son lo recados que la madre naturaleza manda para tenerlo en cuenta a la hora de las construcciones en lugares seguros.
Aunque sus Majestades se hubieran presentado a primera hora poco o nada hubieran podido hacer, pero su sola presencia hubiera calmando los ánimos y la gente podría haber sido más protegida mandando las fuerzas sin demora, ahora no es hora de buscar culpables pero sin responsables a la hora de ejecutar las acciones que al parecer no han llegado con la prontitud que se esperaba pero de esta saldremos con más fuerza porque el pueblo entero de España se ha volcado en las ayudas a la gente de Valencia que se ha quedado nada más que lo puesto y lleno de barro, esperemos que la ayudas lleguen con rapidez y no se demoren como en el volcán de la Palma.
03-11-24
El pueblo de Valencia pierde los nervios ante la gran tragedia de la DANA.
Es normal que el pueblo pierda los nervios al sentirse olvidado a primera hora y cuando llegan es tarde y los ciudadanos se queja y suelen perder la compostura y tiran de los primero que encuentran que es el barro, y no reconoce la autoridad porque esta ha reaccionado tarde, aunque no haya tenido la culpa.
Esto será una experiencia que constará en los registros para el que venga después que no tarde en presentar su avales y será creído ante la gran catástrofe que nadie la llamo, pero ella se hizo presente, estos son lo recados que la madre naturaleza manda para tenerlo en cuenta a la hora de las construcciones en lugares seguros.
Aunque sus Majestades se hubieran presentado a primera hora poco o nada hubieran podido hacer, pero su sola presencia hubiera calmando los ánimos y la gente podría haber sido más protegida mandando las fuerzas sin demora, ahora no es hora de buscar culpables pero sin responsables a la hora de ejecutar las acciones que al parecer no han llegado con la prontitud que se esperaba pero de esta saldremos con más fuerza porque el pueblo entero de España se ha volcado en las ayudas a la gente de Valencia que se ha quedado nada más que lo puesto y lleno de barro, esperemos que la ayudas lleguen con rapidez y no se demoren como en el volcán de la Palma.
03-11-24