Reflexión
El calor derrite el hierro y endurece el barro
El crisol en las fundiciones suelen estar recubiertos de arcilla para que no se vaya el calor, por lo menos así es como lo he llegado a comprobar en el tiempo que estuve trabajando en una fundición que el metal de la caldera era de plomo, antimonio y estaño y era calentando con gas y para que no se fuera el calor estaba recubierto de arcilla.
El hombre a través del tiempo va conociendo ciertas facetas que el va acumulando en su cerebro y esta es la experiencia que nos da la vida, y muchas veces no queremos cambiar de trabajo porque estamos anclados en lo que estamos tocando y nos cuesta cambiar y aprender cosas nuevas y es que los hombres tienen que pasar por muchos sitios para coger la experiencia, pero nos cuesta y no nos moveríamos si las circunstancias no nos apremiasen.
La vida nos exige dar ciertos pasos que no nos gusta dar pero a veces la vida se impone y sin quererlo nos vemos envueltos en los problemas y esto va bien para contrastar las cosas que nos van pasando, y uno se acuerda de los dichos que ha ido acumulando en el transcurso del tiempo y sin quererlo vamos escribiendo el libro de nuestra vida.
Las circunstancias son las que mandan ya lo dijo el filosofo que el hombre es el y sus circunstancias, y el nacer en este sitio o en el otro va imprimiendo en nosotros un carácter que obedece a la fuente que es nuestro temperamento que no se puede cambiar porque los cascos se parecen a la botija y es hombre de bien quien a los suyos se parece y es que el temperamento es hereditario y da un carácter que puede ser modulado con la educación la cultura y el medio ambiente.
14-11-24
El calor derrite el hierro y endurece el barro
El crisol en las fundiciones suelen estar recubiertos de arcilla para que no se vaya el calor, por lo menos así es como lo he llegado a comprobar en el tiempo que estuve trabajando en una fundición que el metal de la caldera era de plomo, antimonio y estaño y era calentando con gas y para que no se fuera el calor estaba recubierto de arcilla.
El hombre a través del tiempo va conociendo ciertas facetas que el va acumulando en su cerebro y esta es la experiencia que nos da la vida, y muchas veces no queremos cambiar de trabajo porque estamos anclados en lo que estamos tocando y nos cuesta cambiar y aprender cosas nuevas y es que los hombres tienen que pasar por muchos sitios para coger la experiencia, pero nos cuesta y no nos moveríamos si las circunstancias no nos apremiasen.
La vida nos exige dar ciertos pasos que no nos gusta dar pero a veces la vida se impone y sin quererlo nos vemos envueltos en los problemas y esto va bien para contrastar las cosas que nos van pasando, y uno se acuerda de los dichos que ha ido acumulando en el transcurso del tiempo y sin quererlo vamos escribiendo el libro de nuestra vida.
Las circunstancias son las que mandan ya lo dijo el filosofo que el hombre es el y sus circunstancias, y el nacer en este sitio o en el otro va imprimiendo en nosotros un carácter que obedece a la fuente que es nuestro temperamento que no se puede cambiar porque los cascos se parecen a la botija y es hombre de bien quien a los suyos se parece y es que el temperamento es hereditario y da un carácter que puede ser modulado con la educación la cultura y el medio ambiente.
14-11-24