Reflexión
El referente
El primer referente que encontramos es el de nuestro padres y este perdura toda la vida y más si tenemos algo de memoria y nos gusta rememorar las escenas vividas a temprana edad y que estas son fuente de alegría y al mismo tiempo son las que nos educan para afrentar la vida.
Vemos que la verdadera alegría no es el poseer muchos bienes materiales sino ver en tus padres una armonía en sus comportamientos diarios que este se va almacenando en nuestra memoria y es un caldo de cultivo para nuestra psicología personal, hay muchas virtudes que destacar en el comportamiento de nuestro progenitores y en su comportamiento a nivel de matrimonio.
Uno a edad temprana escucha ciertas frases que se clavan en nuestra conciencia y que cuando menos te los esperas hacen aparición en la mente y a veces uno se recrea en ellas y te das cuenta de cómo actuaron tus progenitores cuando por alguna circunstancias tuvieron que sacrificarse para que nosotros tuviéramos pan, cosa que en aquellas fechas de la posguerra era escaso.
En nuestro hogar el pan nunca llegó a faltar y recuerdo que siempre me llevaba un trozo de pan para el recreo de la escuela y al pasar por la casa de unos condiscípulos míos se lo daba aquellas personas y que su madre les había hecho una torta de harina para almorzar, y en el recreo volvía a mi casa a por otro trozo de pan y mi madre me decía que si ya me había comido el trozo de pan el que me había llevado y que yo se lo había dado a mis amigos.
Aquellos años fueron de mucha penuria y la gente pasaba hambre y cualquier corteza de patatas o de naranjas que se encontraba por la calle se la echaba a la boca como si fuera un manjar, hoy en día no se conoce esto que estoy contando, pero así son las cosas, fijémonos en la gente de Valencia que se acostaron con todo en su casa y a la mañana siguiente lo perdían todo, los recuerdos y la casa incluso la vida.
Esto nunca lo olvidarán, aunque mucho tiempo pase lo llevara impreso en su memoria el resto de sus vidas, no es lo mismo verlo en las noticias por la tele que vivirlo en primera persona, y las ayudas siempre llegan tarde e incompletas.
Este 20 de Noviembre nos trae muchos recuerdos y en particular a mi por que perdía el referente que siempre me había guiado en mis años mozos.
20-11-24
El referente
El primer referente que encontramos es el de nuestro padres y este perdura toda la vida y más si tenemos algo de memoria y nos gusta rememorar las escenas vividas a temprana edad y que estas son fuente de alegría y al mismo tiempo son las que nos educan para afrentar la vida.
Vemos que la verdadera alegría no es el poseer muchos bienes materiales sino ver en tus padres una armonía en sus comportamientos diarios que este se va almacenando en nuestra memoria y es un caldo de cultivo para nuestra psicología personal, hay muchas virtudes que destacar en el comportamiento de nuestro progenitores y en su comportamiento a nivel de matrimonio.
Uno a edad temprana escucha ciertas frases que se clavan en nuestra conciencia y que cuando menos te los esperas hacen aparición en la mente y a veces uno se recrea en ellas y te das cuenta de cómo actuaron tus progenitores cuando por alguna circunstancias tuvieron que sacrificarse para que nosotros tuviéramos pan, cosa que en aquellas fechas de la posguerra era escaso.
En nuestro hogar el pan nunca llegó a faltar y recuerdo que siempre me llevaba un trozo de pan para el recreo de la escuela y al pasar por la casa de unos condiscípulos míos se lo daba aquellas personas y que su madre les había hecho una torta de harina para almorzar, y en el recreo volvía a mi casa a por otro trozo de pan y mi madre me decía que si ya me había comido el trozo de pan el que me había llevado y que yo se lo había dado a mis amigos.
Aquellos años fueron de mucha penuria y la gente pasaba hambre y cualquier corteza de patatas o de naranjas que se encontraba por la calle se la echaba a la boca como si fuera un manjar, hoy en día no se conoce esto que estoy contando, pero así son las cosas, fijémonos en la gente de Valencia que se acostaron con todo en su casa y a la mañana siguiente lo perdían todo, los recuerdos y la casa incluso la vida.
Esto nunca lo olvidarán, aunque mucho tiempo pase lo llevara impreso en su memoria el resto de sus vidas, no es lo mismo verlo en las noticias por la tele que vivirlo en primera persona, y las ayudas siempre llegan tarde e incompletas.
Este 20 de Noviembre nos trae muchos recuerdos y en particular a mi por que perdía el referente que siempre me había guiado en mis años mozos.
20-11-24