Es verdad, amapolas hay en todos los pueblos, pero no sólo es la flor lo que tienes que mirar. ésta, que ha nacido en nuestro pueblo, respira el aire puro de Cañaveruelas y está bañada por un sol limpio de contaminación y cada día es acunada y mimada por la brisa bresca que corre al atardecer los días de primavera. Además, si paseas por el campo verás que en nuestro pueblo crecen unas amapolas moradas muy difíciles de encontrar en cualquier otro lugar. Saludos Tiberios!!!