Luz fijo a 0,11115 €/kWh

Homenaje a los soldados fallecidos en África con su Belén, CUENCA

Foto de Rs. EM

El nacimiento, belén o pesebre

Cultura • Sociedad
Gisela Ortega

El nacimiento, belén o pesebre
La Navidad es la celebración del Nacimiento de Jesús, que tuvo lugar en Belén, un pueblo de Palestina, hace más de dos mil años. Es una de las festividades más importantes del cristianismo.

Es a partir del siglo XIX cuando la Navidad comienza a consolidarse con el carácter que tiene hoy día. Se celebra el 25 de diciembre y cuatro semanas antes tiene lugar el Adviento, un tiempo de espera y de preparación interior.

Nacimientos, belenes, pesebres o portales es la representación plástica de la natividad de Jesús, que se suele exponer durante las fiestas de Navidad en hogares, Iglesias, comercios, etc. Forma parte de la liturgia navideña en muchas partes del mundo especialmente en la tradición católica

Según la leyenda, la primera celebración en la que se instaló un pesebre para la conmemoración de esta solemnidad fue en la Nochebuena de 1223 realizado por san Francisco de Asís, en una cueva próxima a la ermita de Greccio –Italia-. Este acontecimiento no fue representado con figuritas y miniaturas de objetos cotidianos, como se hace actualmente, ni con personas, aunque para la ocasión San Francisco si utilizó animales.

El belenismo o construcción de belenes —también llamados nacimientos, pesebres o portales—, hace referencia a los diversos tipos y modelos de representación plástica del nacimiento de Jesucristo.

Historia

La primera celebración navideña en la que se montó un belén para la conmemoración del nacimiento de Jesucristo fue en la Nochebuena de 1223, realizado por San Francisco de Asís, en una cueva próxima a la ermita de Greccio (Italia). La escena del nacimiento de Cristo no fue representada con figuritas y miniaturas de objetos cotidianos, como hacemos actualmente, ni con personas, aunque para la ocasión San Francisco sí utilizó animales. Se celebró la misa nocturna acompañada de una representación simbólica de la escena del nacimiento, mediante un pesebre (sin niño) con el buey y la mula, basándose en la tradición cristiana y los Evangelios apócrifos, así como en la lectura de Isaías: "Conoce el buey a su dueño, y el asno el pesebre de su amo. Israel no conoce, mi pueblo no discierne" (Is. 1,3). Estos animales ya aparecen en el pesebre del siglo IV, descubierto en las catacumbas de la Basílica de San Sebastián de Roma, en el año 1877. Cuenta San Buenaventura, en su Legende de Santi Francisci, que tras celebrar la misa el sacerdote sobre el pesebre (utilizándolo como altar), San Franciso cantó el Evangelio y realizó la predicación sobre el nacimiento de Cristo, hijo de Dios, en circunstancias tan humildes como las que en aquel momento se reproducían (es decir, en una fría noche invernal, dentro de una cueva, resguardado en el lugar donde comían los animales que, junto al Niño, lo calentaban con su aliento), causando una enorme emoción entre los asistentes, de tal forma que el señor del lugar, Juan de Greccio, "aseguró que vio un hermoso niño dormido en el pesebre, que el padre Francisco cogió en sus brazos y lo hizo dormir". Se supone que tras esta primera ocasión (en la que más que un belén puede asimilarse a un drama litúrgico) se fue popularizando la instalación de belenes en las iglesias durante la Navidad, con figuras de terracota, cera o madera en vez de seres vivos.

Antes de la celebración de Greccio, existen muchos antecedentes de representación plástica del nacimiento de Jesús, tanto en las catacumbas romanas (lo que da idea de su relación con el cristianismo primitivo) como en las iglesias y otros lugares relacionados con el culto religioso cristiano. Los antropólogos e historiadores relacionan directamente las figuras del belén con diferentes objetos de culto de formas antropomórficas y animales, desde las Venus prehistóricas hasta las pequeñas esculturas griegas llamadas tanagras, pero muy especialmente por el culto romano a los dioses del hogar (lares) que se realizaba también mediante pequeñas esculturas con forma humana y que se custodiaban en el larario
(20 de Diciembre de 2020)